Skymines, la reimplementación del juego de mesa Mombasa

Tan solo unos meses después de que Armstrong y Aldrin caminaran sobre la superficie lunar, el Gobierno Mundial inició su proyecto más ilusionante. La humanidad tenía a su alcance una nueva superficie que, a pesar de no reunir las condiciones para ser habitable, sí que era una gran oportunidad para extraer todo tipo de materiales. Las excavaciones no tardaron en sucederse, y así se han mantenido hasta el día de hoy, cuando los grandes desajustes políticos y económicos han provocado un cambio de paradigma.

Skymines es un juego de mesa de la editorial Maldito Games. En él, en la piel de intrépidos inversores, viajaremos hasta el satélite natural de la Tierra para extraer valiosos recursos, que lo serán aún más cuando los destinemos a ampliar la red de puestos avanzados de las compañías más punteras que se están asentando en la Luna. ¿Por cual apostar? Pero no nos obsesionemos con ello, pues más allá de esta lucha territorial, si apoyamos las investigaciones de nuestros científicos e impulsamos la recolección de Helio-3 también podemos llevarnos una cantidad importante de cibercréditos.

Preparación de partida

En primer lugar, desplegamos el tablero Lunar en el centro de la mesa. En cada lado del tablero, vamos a situar un medidor de compañía, ya sea utilizando la configuración predeterminada o en su defecto una aleatoria, haciendo uso de las cartas de medidores.

Colocamos los 15 puestos avanzados en las casillas de sus respectivas estaciones.

A continuación, preparamos las cartas de acción. Las separamos por la letra, barajamos cada grupo de cartas por separado y creamos un mazo de cartas de acción, en el que estas queden ordenadas alfabéticamente, de modo que en la parte superior queden las cartas con la letra A y en la inferior las de la E. Posteriormente, rellenamos el despliegue de cartas siguiendo el orden numérico impreso en los espacios del tablero.

Dejamos los cibercréditos a un lado, en lo que será el suministro.

Pasamos a preparar el despliegue de investigación:

• La fila superior es el track de rondas. Ponemos un cibercrédito de la casilla 2 en adelante y ponemos encima, boca abajo y en la casilla que corresponda, los planes de investigación especiales.
• Colocamos un cibercrédito adicional en la casilla de suplemento.
• Separamos los planes de investigación por su letra, los mezclamos y creamos 3 pilas de robo, de las cuales vamos tomando losetas para rellenar los espacios del despliegue en función de la letra.

Ponemos las 4 losetas de bonificación al lado de las casillas que llevan su nombre.

Tras ello, cada jugador escoge un color y recibe:

• Un tablero de jugador, que lo coloca frente a él.
• Un marcador identificativo de su color, que pone en la esquina superior izquierda de su tablero.
• 2 marcadores de on/off, que pone por el lado off en los espacios de acción extras.
• 1 cibercrédito y 3 o 2 marcadores de bonificación en partidas a 2 o 3-4 jugadores respectivamente.
• 4 marcadores de medidor, colocando cada uno en la casilla 0 de cada medidor de compañía.
• Un jugador se queda el marcador de jugador inicial y el orden de turno será en sentido horario.
• 9 cartas de acción iniciales, más una adicional de energía específica según el orden de turno.
• Una ficha de investigación inicial, en función del orden de turno o aleatoriamente. Esta se pone en el primer espacio del medidor de investigación, la cual indica qué cartas debe poner en su zona de descanso y una bonificación inicial en forma de progreso en ciertos medidores.
• Un marcador de Helio-3, que pone en la casilla inicial del medidor de Tanque.
• Un marcador de Carga, que sitúa en la parte izquierda de su ficha de investigación inicial.

Y con esto ya estaríamos listos para jugar una partida a Skymines.

¿Cómo se juega a Skymines?

Una partida a Skymines transcurre a lo largo de 7 rondas. Nuestro principal objetivo durante la partida, influir en la expansión de las compañías que quieren asentarse en la superficie lunar, aportando recursos y energía, adquiriendo en paralelo participaciones de las mismas para obtener la mayor cantidad de cibercréditos (la nueva moneda lunar) posible.

Cada ronda se compone de 3 fases.

Fase 1: planificación

Simultáneamente, los jugadores deciden qué cartas de su mano van a ejecutar en la siguiente fase. Pueden preparar, boca arriba, tantas cartas como espacios tengan habilitados (con el símbolo ON) en su área de acciones.

Fase 2: acciones

Comenzando por el jugador inicial y en sentido horario, en Skymines los jugadores se alternan para jugar en su turno una de las siguientes acciones, activando una o varias cartas que han bajado a sus espacios de acción previamente y volteándolas después de su uso para indicar que pasan a estar inactivas.

• Usar cartas de recurso: elige una o más cartas de recurso de un mismo tipo de su área de acción y suma los recursos que le proporcionan. Estos pueden utilizarse para:
  • Adquirir una sola carta del despliegue: paga el coste de esta, el cual se obtiene de la suma del coste de la carta y del espacio, y se la lleva a su mano.
  • Avanzar medidores de compañía: a razón de un espacio por punto de recurso que le quede, pudiendo repartirlos como considere oportuno entre los 4 tracks.

• Usar todas las cartas de energía: suma los puntos de energía (PE) de las cartas para expandir una compañía. Esta expansión le llevará a colonizar sectores donde no tiene presencia dicha compañía. Para hacerlo:
  1. Comprueba si el sector objetivo está adyacente a la estación o a un sector que ya controle la compañía.
  2. Gasta los PE para llegar al sector: utiliza 1 PE para cruzar una línea simple, 2 PE para una línea doble y 1 PE extra para ocupar un sector donde hay otra compañía.
  3. Coge un puesto avanzado de la estación en cuestión, siguiendo un orden determinado, y lo ubica verticalmente en el sector objetivo.
  4. A continuación:
     • Si le quedan PE, puede repetir los pasos del 1 al 3 para colonizar más sectores.
     • Si no le quedan PE, obtiene la recompensa de cada sector que ha colonizado: cibercréditos, avanzar en medidores de compañía o de tanque y/o puntos de investigación, devuelve a la estación que corresponda el puesto de otra compañía si lo hubiera y tumba la estación que ha colocado para indicar que ya la ha resuelto por completo.

Hacemos una pausa en la explicación de las acciones para hablar de los puntos de investigación (PI) que acabamos de mencionar. El jugador los emplea para comprar planes de investigación, estándar o especiales, del despliegue de investigación. Estos se colocan boca arriba en el medidor de su tablero personal, ya sea en una casilla libre a su elección o encima de una ya ocupada por la que todavía no haya pasado su marcador de carga.

• Usar 1 carta de científico investigador: esta acción se desglosa en 3 pasos:
  1. Si quiere, gasta 2 cibercréditos para poner boca abajo un plan de investigación de su medidor.
  2. Mueve su marcador de carga por el medidor de investigación si en el espacio siguiente hay un plan de investigación y si cumple los requisitos de estas con las cartas que están boca arriba en sus espacios de acción (o está boca abajo y puede obviarlos).
  3. En el plan donde se detenga, le proporciona una recompensa inmediata que aplica.
  4. Recibe PI que utiliza como hemos indicado antes.
• Usar 1 carta de científico de campo: le permite avanzar su marcador de Helio-3 en su medidor de Tanque.

• Usar 1 marcador de bonificación: toma uno de los marcadores disponibles y lo coloca en una casilla de bonificación libre. Las hay de 4 tipos:
  • Por mayorías: si en ese preciso momento, el jugador activo es quien más cartas/unidades tiene según corresponda, pone su marcador y se lleva la recompensa asociada.
  • Normales: una permite obtener el marcador de jugador inicial, otra comprar una carta del despliegue pagando con cibercréditos y otra descartar una carta de la mano para ganar cibercréditos.
  • Losetas de bonificación: en la próxima ronda, el jugador en cuestión dispondrá de la ventaja que haya escogido: un recurso adicional, una loseta de científico de campo, otra de investigador y 2 de energía extra. Una vez usadas se devuelven junto al tablero.
  • Medidores de compañía: algunos tracks también disponen de acciones especiales que solo se pueden usar empleando estos marcadores.
• Concluir la fase de acciones: si no quiere o puede hacer ninguna acción más puede pasar, no sin antes hacer una especie de mantenimiento personal mientras continúa el siguiente jugador.
  1. Pone boca arriba las cartas de su zona de acción.
  2. Elige un espacio de descanso y lleva a su mano todas las cartas de este.
  3. Reparte sus cartas de la zona de acción entre los espacios de descanso, siguiendo la distribución que quiera pero de forma que cada carta vaya a un espacio de descanso distinto.

De este modo, los jugadores prosiguen hasta que todos hayan pasado.

Fase 3: mantenimiento

Ahora, llega la hora de prepararlo todo para jugar una nueva ronda:

• Le damos la vuelta al plan de investigación especial de la siguiente ronda. El cibercrédito que había debajo, lo ponemos en el espacio de suplemento.
• Cada jugador recupera sus marcadores de bonificación y se lleva la loseta de bonificación si es pertinente.
• Se repone el despliegue de cartas. Las que estuvieran en la columna derecha se decartan, las restantes se desplazan a la derecha y rellenamos los huecos restantes por orden numérico.

Fin de la partida

Al término de la 7ª ronda, pasamos al recuento de PV:

• 1 PV por cibercrédito sobrante.
• Por cada compañía, cada jugador suma el total de participaciones, de sus cartas y los obtenidos del medidor de dicha compañía, y lo multiplica por la cantidad de cibercréditos visibles en la estación de la compañía.
• Tantos PV como la última casilla de puntuación superada del medidor de Tanque.
• Tantos PV como la última casilla de puntuación superada del medidor de Investigación, más los PV de las fichas de investigación especiales que estén boca arriba y por las que haya pasado su marcador de Carga.

El jugador con más PV se lleva la partida a este Skymines.

Variante

Espacios vinculados es una pequeña variante que introduce este Skymines. En ella, cada espacio de acción está conectado con el espacio de descanso inmediatamente superior, lo que nos obliga a colocar las cartas jugadas en las pilas indicadas al realizar la acción concluir la fase de acciones.

Campaña y módulos

La campaña de Skymines está compuesta por 4 capítulos, que se pueden jugar por orden para determinar un vencedor global, o por separado para disfrutar de diferentes experiencias de juego a través de sus módulos.

Cada capítulo tiene sus particularidades, que comentaré por encima para que tengáis una idea general de lo que incorporan:

• El capítulo 1 añade a la partida una carta de misión común, en la que se muestran 3 tareas a cumplir por los jugadores. Cada vez que un jugador complete una obtiene cibercréditos y desbloquea un marcador de bonificación de un solo uso. En el momento en el que desbloquee los 3, dispondrá de una casilla de bonificación extra el resto de la partida.
• El capítulo 2 nos propone un nuevo tablero principal: Cinturón. Este área de juego cambia el dibujo pero no la esencia del juego. En lugar de competir por la expansión de las compañías por la Luna, lo haremos por el cinturón de asteroides, los cuales están conectados entre sí por medio de lanzaderas que nos tocará poner en marcha para llegar a cada uno de ellos.
• En el capítulo 3 volvemos a la Luna. Al igual que en el capítulo 1, jugamos con una carta de misión, pero esta vez partimos con un setup con un ligero cambio. Empezamos la partida con 3 puestos avanzados de cada compañía ya colocados en el tablero.
• El capítulo 4 se juega de nuevo en el tablero de Cinturón, esta vez introduciendo una carta de misión y también una carta de amenaza. Su efecto negativo repercutirá a todos los jugadores al término de la partida. No obstante, el jugador que consiga llegar hasta ella durante las 7 rondas y cumplir su requisito, impedirá que se produzca, reportándola como premio una recompensa y una participación de compañía comodín.

Luna

Skymines nos ofrece la posibilidad de incluir un jugador adicional a través de Luna. Este automa:

• Es indispensable para sacar el juego en el modo solitario, aunque también da juego si queremos contar con un jugador más en mesa en partidas a 2 y 3.
• Se puede ajustar su dificultad haciendo una serie de modificaciones al inicio de la partida.
• Se puede utillizar para jugar al juego base, a la campaña o a módulos sueltos.

En cada ronda, cuando los jugadores finalicen su fase de planificación, se procede a preparar la zona de Luna, quien cuenta con un mazo propio que se irá mejorando durante la partida. De este tomaremos cartas para rellenar tanto sus espacios de acción, los cuales se pondrán en juego en la siguiente fase siguiendo las indicaciones, y sus espacios de mayoría, para competir por las bonificaciones por mayoría disponibles durante la ronda.

Reseña del juego de mesa Skymines

Invertir en un negocio es una actividad de alto riesgo, que puede hacernos de oro si crece como la espuma o arruinarnos si pega el batacazo del siglo. Ahora, 4 compañías se lanzan a la aventura en la Luna y necesitan financiación. Una ocasión ideal para amasar una gran fortuna y que pinta de maravilla, lastima que la noticia haya llegado a oídos de otros grandes inversores. ¿Quién se llevará a Félicette al agua?

Nuestro querido Alexander Pfister (autor de Maracaibo entre otros) está de vuelta, y esta vez lo hace con un título que no es del todo una novedad. Skymines es una reimplementación de Mombasa, en el que dejamos atrás la pequeña localidad de Kenia para viajar a la Luna. Mismo juego de mesa, al menos en cuanto a lo que concierne al juego base. Pero antes de ver qué nos trae este juego espacial que no lo hizo en su día Mombasa, veamos qué tienen en común.

Nos encontramos con un juego que principalmente gira en torno a la programación de acciones mediante cartas. Al empezar la partida, cada jugador recibe un pequeño grupo de cartas, variado en cuanto a tipología y cantidad de elementos, que le permitirá hacer unas acciones u otras con un impacto diferente en partida. Al inicio de la ronda, los jugadores echarán un vistazo a su mano de cartas y escogerán cuales van a utilizar en la ronda en curso. Por turnos, los jugadores elegirán qué harán con ellas, montándose una pequeña película de cómo optimizar sus 3-5 acciones próximas. Conseguir recursos, con los que comprar nuevas cartas para mejorar su mano de cartas o progresar en los medidores de las compañías; gastar energía, para expandir el área de influencia de las compañías y llevarse algún plan de investigación; apoyar a sus científicos, acumulando PV y recompensas alineando losetas con requisitos parecidos; o fomentar la recolección de Helio-3 para acumular más PV. Y no olvidemos los marcadores para adelantarnos en las preciadas y reñidas bonificaciones.

Sobre la mesa, un juego relativamente sencillo de programación de acciones, donde elegiremos de antemano las cartas que vamos a usar en la ronda, teniendo en cuenta lo que van haciendo nuestros compañeros de juego por si nos pisan alguno jugada, la limitación de espacio en nuestra zona de acciones (que no nos dejará hacer todo cuanto nos gustaría) y por supuesto la zona de descanso.

¿Y qué es eso de la zona de descanso? Sin duda esto es lo que impulsa a este Skymines para convertirlo en una propuesta con una alta dosis estratégica, que nos hará darle, y mucho, al coco. Las cartas empleadas en la ronda no regresan a la mano al concluir esta. Van a parar a distintos espacios bloqueados, donde permanecerán inhabilitadas por tiempo variable. Así, al final de cada ronda, podremos recuperar todas las cartas de un único espacio para tenerlas de nuevo disponibles. Esto hace que lo que parecía una fase de planificación con visión a corto plazo, dé un giro hacia el largo plazo, apretando a los jugadores para que desarrollen su partida con la mirada puesta a un par de rondas vista como poco, para cuadrarse las cartas con la intención de potenciar turnos de rondas venideras.

Rondas que podremos exprimir con el uso de los bonificadores, especialmente llamativos la lucha por las mayorías para acelerar en los medidores y las casillas de losetas para disponer de mejoras en la siguiente ronda, y habilitando nuevos espacios de acción como ya vimos en Ganges. Al superar la barrera marcada en cada uno de los 2 tracks personales (medidor de Tanque y de Investigación), desbloquearemos un nuevo espacio para bajar una carta más, punto que puede marcar la diferencia si somos capaces de hacerlo con suficiente margen respecto a los adversarios.

Estos tracks otorgan un montante importante de PV que nos aseguramos al término de la partida, pero a lo que verdaderamente hemos venido es a invertir en compañías. Y es en el tablero central donde se cuece la disputa entre los jugadores. Aquí, los jugadores tratarán de aumentar la presencia de las compañías por las que están apostando en los medidores de compañía y con la compra de ciertas cartas. Como en la vida misma, se recomienda no poner todos los huevos en la misma cesta. Mejor hacerlo por una o dos compañías a lo sumo que previsiblemente vayan a tener un alto valor al final de la partida, ¿o por qué no esperar a que lo haga otro por nosotros? No obstante, la posibilidad de devolver a la estación puestos avanzados de otras compañías para debilitarlas a cambio de potenciar la que nos interesa, hace que el juego coja un punto de incertidumbre que le sienta genial. El nerviosismo crece conforme avanza la partida, y más cuando llega el tramo final y ya están las participaciones de cada uno claras.

¿Y qué diferencia a Skymines de Mombasa? Pues en lo que llevamos de reseña prácticamente nada. Ahora bien, Skymines incorpora una serie de añadidos que lo mejoran notablemente respecto a su hermano mayor. Por un lado tenemos Luna, un automa que se lleva con facilidad que permite jugar en modo solitario y también introducir un jugador más en partidas a 2 y 3 para que haya más salseo. ¿Qué nos gusta jugar a 2-3 con mayor control sobre la partida? Jugamos sin bot. ¿Qué queremos jugar a 2-3 pero con más interacción? Luna sale a escena. En definitiva, ha mejorado la escalabilidad del anterior. Por otro lado, también tenemos los módulos, que se van combinando entre sí para que la variabilidad del juego sea mayor gracias a un nuevo tablero que da mucho juego, las cartas de misión y en menor medida las amenazas, que además han dado forma para crear una especie de campaña a 4 partidas con las distintas combinaciones que dictarán quién es el gran vencedor en este reto espacial.

Pros

• Sencillo pero profundo: las acciones en sí son fáciles de comprender y se explican en 5 minutos. Pero a partir de ahí, el juego ofrece un buen desafío para los jugadores en función de lo exigentes que sean con ellos mismos para maximizar los beneficios de sus inversiones.
• Sistema de programación de acciones: no suelen llamarme la atención los juegos de programación de acciones. Sin embargo, en este caso la particularidad de cómo se va gestionando la planificación a medio-largo plazo por medio de las zonas de descanso ha conseguido que este Skymines me enganche.
• Variabilidad: en el juego ya de por sí es imposible ir a todo lo cual, junto con la posibilidad de cambiar los medidores de compañía entre las distintas opciones, hacen que en cada partida el planteamiento pueda diferir sustancialmente. Pero además ahora, con los módulos que incorpora esta reimplementación, la variabilidad se dispara.

Contras

• Setup: preparar el juego lleva bastante tiempo y las cajitas, aunque vienen estupendamente para organizar los componentes y localizarlos con facilidad, no ayudan. Los estrechos compartimentos impiden que podamos acceder a los componentes con facilidad.
• Azar despliegues: el despliegue de cartas puede hacer que una carta, según en la fila que aparezca, tenga un coste total algo superior que otra con características similares. Por su parte, el medidor de Investigación fuerza a aprovechar la acción para avanzar lo máximo posible en el track encadenando planes que compartan elementos. En este caso el despliegue de investigación no siempre acompaña al reponer, y nos llevará a pagar un par de cibercréditos para evitar quedarnos atascados.
• Análisis parálisis: las partidas suelen fluir bien, pero no es de extrañar que por el sistema de programación de acciones, si compartimos mesa con un titán del AP, se acabe alargando más de lo previsto.

Mi veredicto

Y con esto vamos cerrando la reseña de este Skymines. Uno de los juegos de mesa que esperaba con más ganas de este 2022 y que ha cubierto las expectativas con creces. Un título de programación de acciones y gestión de mano que brilla gracias al método de recuperación de cartas, lo que nos lleva a una planificación a largo plazo que, cuando conseguimos cuadrar todo lo planteado, deja un sabor de boca maravilloso. Un juego muy disfrutable que te mantiene en tensión hasta el final de partida, y que llega ahora con esta reimplementación con una producción estupenda y que además trae varios elementos que lo hacen más redondo que Mombasa. Por ello, le doy mi emblema de un señor juegazo.