Los amantes de Sherlock Holmes y Agatha Christie estamos de suerte. El juego de mesa Sherlock: Entre tumbas, mezcla de forma majestuosa la deducción y el misterio. Nos pondremos en la piel de este famoso investigador, para a través de nuestras suposiciones y las de nuestros compañeros conseguir resolver el sorprendente caso ocurrido en el cementerio, lo que lo vuelve más siniestro si cabe. ¿Estáis preparados para resolver este escalofriante y misterioso caso?

Este juego de mesa de la editorial GdM Games (para los más veteranos Guerra de Mitos), pertenece a una serie de juegos de la misma mecánica, Serie Q System: Sherlock. En ellos, tomamos el papel del grandioso detective Sherlock que debe investigar un recóndito caso policíaco, de forma solitaria o con nuestro gran equipo de investigación de hasta ocho detectives leales entre sí. Pero no son casos nada fáciles, toca averiguar misterios, elaborar teorías y deducciones para resolver el crimen. En este caso, en concreto, tenemos en manos una desaparición en un espeluznante cementerio, ¿dónde está Adam Lockwood?

Portada de Sherlock: Entre tumbas
Número de jugadores:1 – 8
Duración:60 minutos
Edad mínima:10 años
Género:límites en la comunicación
deducción
gestión de mano
memoria
Complejidad:1,75 / 5
Editorial:GdM Games
Guión:Alberto Millán
Ilustración:Pedro Soto
Precio recomendado:6,80€

Preparación de partida

¡Atención! En primer lugar, quiero advertir que es muy importante para prevenir posibles spoilers del juego, seguir las instrucciones y reglas marcadas al pie de la letra. Debemos mantener la inmersión del juego de mesa en todo momento y no husmear más de la cuenta en las reglas, aunque vayamos de detectives. Pero no hay que preocuparse, es fácil.

En la primera carta del mazo, encontramos una serie de instrucciones que debemos seguir para comenzar la partida:

  1. Escanear el código QR de la imagen (audición) o el texto introductorio de las reglas. Este nos sumerge en la historia desde el principio ¡estamos perdidos amigos!, no nos iremos de la mesa sin resolverlo.
  2. Se separa la carta inicial (cementerio), se coloca sobre la mesa y se baraja el resto sin mirarlas (2º aviso, no se fisgonea, perderá gracia el juego si os adelantáis).
  3. Se reparten 3 cartas a cada jugador (2 cartas en caso de 6 o más investigadores en juego).
  4. Dejamos el resto de cartas en un mazo, boca abajo, en el centro de la mesa (las pistas y misterios saldrán de él, muy importante robar con cuidado).

Como he mencionado, el juego de mesa Sherlock: Entre tumbas comienza con una pequeña introducción y una carta inicial. En este caso, se corresponde con un mensaje urgente de la comisaría de policía, que nos informa de la desaparición de un empleado del cementerio, el señor Adam Lockwood. Ante la batalla de mafias, la comisaría de policía está saturada, por lo que se ruega nuestra ayuda para resolver este enigmático caso. Como carta de inicio, tenemos representado el último lugar dónde fue visto el desaparecido Adam Lockwood, el espeluznante cementerio Eden. ¿Preparado Sherlock? No todo será tan elemental, mi querido Watson, hay que estar muy atentos a los detalles.

Empezando una partida a 4 a Sherlock: Entre tumbas

¿Cómo se juega a Sherlock: Entre tumbas? 

En este juego de mesa deductivo, las pistas son narrativas y las tendremos que analizar y leer entre líneas, en solitario o con nuestro equipo de investigadores (mecánica cooperativa). Si no sois unos llaneros solitarios, es muy importante compartir información con los aliados en el caso, pero no podemos enseñar las cartas robadas, hay que tomar la decisión de si es una pista veraz y decisiva o no. Por tanto, el desarrollo del juego consiste en una serie de rondas por turnos hasta jugar todas las cartas. En su turno, cada jugador puede decantarse por:

  1. Revelar información: elige una carta de su mano que considere relevante para el caso y la coloca sobre la mesa. Una vez visible para todos, la puede leer en voz alta (por ahora no podemos debatir sobre ella).
  2. Descartar información: elige una carta de su mano y la pone boca abajo en el mazo de descartes, esa información se ha considerando irrelevante para el caso. Aunque la descarte, no podrá hablar de la pista hasta que se hayan jugado todas las cartas (los compañeros no pueden tener información extra sobre estas decisiones).

Al acabar su turno, el jugador roba una carta del mazo y pasa el turno a otro investigador del equipo. Cuando todas las cartas del mazo han sido reveladas o descartadas, llegamos a la última fase del juego: la toma de decisiones. En esta última fase, entre todos debemos formular una hipótesis que explique los hechos en consonancia con la información obtenida. Nota: en esta fase se puede hablar libremente de las pistas descartadas (si las recordamos, claro).

Fin de la partida

El juego se termina cuando todas las cartas de pistas han sido usadas y se ha llegado a una teoría común, para resolver los misteriosos hechos acontecidos. Después, se resuelve el cuestionario, cada respuesta correcta otorga 2 puntos de mérito por buen investigador. Pero ¡ojo!, las cartas con pistas irrelevantes que han sido reveladas restan 1 puntos cada una. Con la puntuación final, el juego te concede un grado de investigador desde Sherlock Holmes (el extraordinario) a Inspector Lestrade (el más despistado). ¿Qué tipo serás tú? ¡Apuesto por ti, no me falles!

Variante para modo solitario

Si eres un intrépido investigador al que le gusta ser un lobo solitario en la resolución de casos como el gran Sherlock Holmes, este juego te lo permite si sigues las siguientes variaciones:

  • Tu mano será de 6 cartas.
  • Cuando descartes, debes decidir si lo haces en el descarte definitivo o en uno provisional (el cajón de las dudas, lo llamaría yo).
  • Si el descarte definitivo tiene al menos 6 cartas al agotarse el mazo de juego, baraja el descarte provisional y úsalo para crear un nuevo mazo para robar. Volverás a usar las pistas que habías descartado provisionalmente, pero en esta segunda ronda tendrás que decidir su destino final: revelar o descartar de manera definitiva.

Reseña del juego de mesa Sherlock: Entre tumbas

Jamás pude pensar que un juego tan pequeño en apariencia, pudiera albergar dentro tanta magia jugona. Con este juego, me uno al mítico lema «el tamaño no importa», pues lo importante es la intensidad que te transmite. El juego de mesa Sherlock: Entre tumbas, me ha envuelto en la historia desde el minuto cero, todo comienza en un misterioso cementerio en el que ha acontecido una enigmática desaparición, ¿puede sonar más intrigante?.

El juego se desarrolla a través de una serie de pistas visuales y de narrativa, en las cuales debes deducir si la información que transmiten es relevante o no para el caso, no es una ciudad precisamente tranquila… La historia y el caso te sumergen en un gran misterio que deberás resolver poniendo en juego toda tu imaginación y lógica. ¡A calentarse la cabeza uniendo cabos! Y si jugamos en grupo, la cosa se complica… a ver quién convence a los compañeros detectives que tu hipótesis es la mejor, pues quizás cada uno tenga la suya.

No tengáis miedo y enfrentaros a este misterioso caso. Os aseguro que si lo probáis no será el único caso al que os queráis apuntar, es un juego que engancha y te reta.

Llegaréis a igualar al increíble Sherlock u os conformaréis siendo un simple detective policial… ¡Suerte!

Pros

  • Adictivo: el juego te envuelve completamente, resolváis el caso o no, seguro que querréis echarle el guante a otro caso. ¡Gracias que existe una saga entera! Yo ya estoy pensando en el próximo que jugaré… ¿qué nuevo misterio tendrá? La intriga está servida.
  • Temática y narrativa: la historia está muy bien hilada y te involucra magníficamente, cuando vayáis leyendo las pista, no podréis evitar imaginaros los enredos y tramas que el caso esconde. ¡Me está costando no mencionar spoilers! Pero gran temática y narrativa en el caso, me ha encantado resolverlo.
  • Tamaño y precio: me parece un tamaño perfecto para poder disfrutarlo en cualquier lugar (lo importante no es el continente sino el contenido) y un precio fantástico para repetir con otro caso.

Contras

  • Rejugabilidad: es cierto que cuando resuelves el caso no podrás volver a jugarlo. Pero recomiendo que lo volváis a disfrutar presentándolo a otros amigos que lo jueguen delante vuestra, es tremendamente divertido ver sus quebraderos de cabeza y tener que morderte la lengua con sus decisiones.
  • Se pasa volando: tiene una duración aproximada de 60 minutos, pero te sumerge tanto en la narrativa que el tiempo vuela. A mi se me hizo muy corto, pero eso es que lo disfruté mucho. Confieso que me atrapó el caso.
  • Solitario: el juego te ofrece una versión en solitario sin embargo, si tenéis la posibilidad, os aconsejo que lo disfrutéis con amigos, las múltiples hipótesis que saldrán a la luz de la misma historia os volarán la cabeza. ¡¿Cómo es posible con las mismas pista en mesa?! Pero eso lo hace al final más divertido y desquiciante a la vez. Con más es mucho mejor, desde mi lupa de investigador-meeple.  

Mi veredicto

Como buen meeple-detective, yo también tengo que tomar mi decisión sobre este gran juego de indagación. Como gracias a él, me he convertido en un auténtico Sherlock Holmes, no me queda más remetido que concederle mi emblema de juego recomendado. ¡Es pura adicción, peor que las pipas!

Juego recomendable para una ludoteca estándar
 
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