Un mazo de cartas está formado por cartas (como es obvio) que tienen algo en común y es por ello que se agrupan en una misma pila. En un juego de mesa podemos encontrarnos con diversos tipos de cartas que darán lugar a distintos mazos, de ahí que las cartas se mezclen a traición en el interior de la caja para que nos cueste más trabajo separarlas y preparar el setup inicial.