Drakkar Tum Tum, un viaje vikingo con mucho ritmo

Como cada año, nuestro querido pueblo vikingo ultima el drakkar para viajar a las Islas de la Armonía, donde un gran banquete les espera para celebrar su festividad más representativa. Pero antes de llegar hasta allí, les espera un duro viaje por las gélidas aguas nórdicas, cantando al son de los tambores y esquivando a todo tipo de monstruos marinos y aterradores goblins.

Drakkar Tum Tum es un juego de mesa cooperativo de la editorial Rocket Lemon Games, en el que trabajaremos en equipo para jugar nuestras cartas al ritmo de la canción. Hagamos lo posible por repeler los peligros que nos acechan y alineemos la música para encontrar las Islas de la Armonía antes de que sea demasiado tarde.

Preparación de partida

En primer lugar cogemos las 5 cartas de Drakkar y las disponemos en una fila formando el barco vikingo.

Tomamos 3 cartas de isla al azar y las ponemos boca abajo junto al barco.

Ahora barajamos las cartas de viaje y las separamos en 4 pilas. En 3 de ellas introducimos una carta de vigía, las volvemos a mezclar y creamos un único mazo de viaje, donde los 3 montones superiores tengan una carta de vigía.

Cada jugador recibe una mano inicial de 3 cartas y ya estamos listos para empezar una partida a Drakkar Tum Tum.

¿Cómo se juega a Drakkar Tum Tum?

Una partida a Drakkar Tum Tum se juega a lo largo de un número indeterminado de turnos hasta que avistamos 3 islas o bien se da una de las condiciones de derrota.

Durante la partida, los jugadores cantan simultáneamente la canción que aparece dibujada en las cartas del barco. Al principio será «Drakkar Tum Tum Tum», pero a medida que se vayan jugando cartas, pueden aparecer peligros que recorten la misma, acelerando así el ritmo de la canción.

En cualquier caso, en el preciso momento que se diga el último Tum, el jugador activo juega una carta de su mano sobre una de las cartas centrales del barco.

Nos podemos encontrar con varios tipos de cartas, con sus efectos y particularidades:

• Los remeros se juegan sobre cualquier carta que no sea un peligro.
• Los peligros (goblins, kraken y dragón) se juegan encima de cualquier carta que no sea otro peligro. Eliminan un Tum de la canción.
• Las cartas de defensa (guerreros y ballestas) se juegan sobre cualquier carta y, si esta es un peligro, nos permite recuperar un Tum. Las ballestas son las únicas capaces de eliminar/tapar a los dragones.
• Los remolinos se juegan sobre cualquier carta que no sea un peligro y además invierten el orden de juego.
• Los vigías solo se juegan si las 3 cartas centrales del barco tienen «Tum» del mismo color. De ser así, se detiene la partida para revelar una de las cartas de isla que habíamos dejado junto al barco. Tras resolver su habilidad, reanudamos la partida.

Si el jugador activo juega su carta correctamente, roba una nueva del mazo de robo y seguimos cantando, pero el próximo en jugar carta será el siguiente jugador en sentido horario.

No obstante, puede darse el caso de que se dé alguno de los siguientes errores:

• Alguien se equivoque cantando o deje de hacerlo.
• Alguien juegue cuando no le toque.
• Se juegue la carta sobre otra que no se pueda.
• Juegue su carta antes o después del último Tum, pues hay que hacerlo justo al decirlo.

En los 3 casos, seguimos jugando pero el jugador que se ha equivocado no puede robar carta, por lo que jugará con una menos.

Fin de la partida

Perdemos si:

• Las 3 cartas visibles son de peligro.
• Se agota el mazo de robo.
• Un jugador se queda sin cartas en mano al haber errado 3 veces.

Ganamos inmediatamente la partida a Drakkar Tum Tum si revelamos las 3 cartas de isla.

Variante los clanes

Sustituimos la carta de popa del percusionista gris por el amarillo/rojo. Esta nos indica que para jugar el vigía, además de que las 3 cartas de Tum sean del mismo color, este ha de ser el que marque el percusionista, volteándose tras revelar una isla para ir alternando el color objetivo.

Reseña del juego de mesa Drakkar Tum Tum

Por todos es bien sabido que los vikingos fueron famosos por ser extraordinarios guerreros y por sus peculiares fiestas. En ellas las vestimentas, pinturas, sacrificios y música no dejaban indiferente a nadie, al menos de puertas hacia fuera. En el día de hoy acompañamos a uno de estos pueblos en su viaje a las Islas de la Armonía, lugar en el que tendrá lugar la festividad vikinga más importante del año. ¿A qué suena bien?

Así sería si no fuera porque el viaje no es precisamente por placer. Los vikingos necesitan nuestra ayuda, ya que el camino hasta las Islas de la Armonía será largo y peligroso. El barco ha sido preparado para una travesía movidita, y en él cada vikingo tiene su función. Unos reman sin cesar, otros protegen la embarcación de todo tipo de bestias y alguno que otro está atento para ver cuanto nos queda hasta nuestro destino. Y entonces, ¿qué pintamos nosotros? Calentemos la voz, porque nos va a tocar cantar.

Drakkar Tum Tum es un juego de cartas ligerito donde los participantes cooperan, jugando cartas de la mano y cantando, hasta conseguir que el barco vea tierra hasta en 3 ocasiones. La gestión de mano es relativamente sencilla pues, aunque hay varios tipos de cartas, tanto los efectos al jugarlas como las restricciones de colocación son bastante simples.

Sin embargo, el juego da un giro 360º cuando incorporamos el elemento diferenciador y característico de este título, la canción. A la par que pensamos qué cartas vamos a jugar, cuándo y dónde, también tenemos que preocuparnos de seguir el ritmo de la música. Los jugadores seguirán la letra indicada en las cartas del barco, manteniendo un tempo determinado y a ser posible con cierta alegría, para que el juego sea lo más entretenido posible. Este ritmo no solo pone tiempo a los jugadores para jugar una carta de su mano, sino que además da lugar a despistes al tener que estar atentos a la canción y a las cartas. Esto provoca que los errores salgan a la luz con frecuencia, algo que se acentúa si tenemos en cuenta que, cada vez que un peligro entra y sale del barco, la canción se acorta o se amplía, por lo que de nada sirve poner el piloto automático para centrarnos en las cartas.

Así, Drakkar Tum Tum se convierte en un juego con cierta complejidad, donde continuar el ritmo cambiante y frenético de la canción y jugar las cartas adecuadas para lograr el patrón correcto no es para nada fácil. A 2 jugadores podemos tener mayor control en la partida al depender en un 50% de nosotros, pero a 4 esta se descontrola y supone todo un reto para los jugadores que se animen a echarse unas partidas.

Pros

• Divertido: filler con alma de party game, donde los continuos fallos de los demás, y sobre todo de uno mismo, hacen que las risas estén a la orden del día.
• Original: la canción y su ritmo alegre hacen que, lo que podría ser un juego más entre tantos, tenga algo diferente que lo resalta.

Contras

• Canción: al principio esta tiene su gracia, pero cuando llevas varias rondas cantándola llega a hacer pesada.
• Dificultad: complicado en exceso para el público al que va dirigiendo, lo que puede frustrar a los participantes si se penalizan a rajatabla los errores.
• Cartas de isla: las habilidades tienen poca presencia en partida y en ocasiones pueden no tener ningún efecto en la partida al depender de otros factores que no controlamos o conocemos con antelación.

Mi veredicto

Drakkar Tum Tum es un juego de cartas ligero en el que jugaremos en equipo para lograr que el barco vikingo llegue a buen puerto antes de que los monstruos lo destrocen. Las partidas giran alrededor de la canción que da nombre a este título, la cual hace el juego divertido a la par que complicado, al tener que estar pendientes tanto de las cartas que jugamos como de no perder el hilo de la canción. Por lo comentado con anterioridad, le doy mi emblema de juego de mesa aprobado.