Como detectives privados, con ya cierto prestigio en la resolución rápida de enigmas, la policía local nos pide ayuda de nuevo en una investigación. El Comisario Gallo Pérez nos cuenta que el nuevo caso se trata del robo de una valiosa joya, la diadema escarlata, expuesta en uno de los museos del pueblo a la vista de todos durante la Larga Noche, en la que los museos permanecían abiertos hasta altas horas de la madrugada. ¿Cómo lo habrá logrado, este ladrón o ladrona de guante blanco?

La diadema escarlata, es el 2º caso de los juegos detectivescos de la editorial Hidden Games, presentándonos la escena del crimen de un caso abierto, el cual debemos resolver a través de las pistas que vienen en el sobre (caja del juego), junto a nuestras habilidades deductivas y trabajo en equipo. ¿Nos gusta resolver misterios? Vamos a enfrentarnos a un nuevo interrogante que desvelar.

Portada de La diadema escarlata
Número de jugadores:1 – 6
Duración:90 – 150 minutos
Edad mínima:14 años
Género:deducción
movimiento oculto
Complejidad:1,63 / 5
Editorial:Hidden Games
Precio recomendado:23,90€

Preparación de partida

En este juego de mesa de deducción, es muy importante ambientar la zona de trabajo como próximos detectives, por lo que antes de comenzar la aventura se recomienda buscar bolígrafos y papel, para realizar anotaciones sobre las sospechas e hipótesis que vayamos barajando durante la investigación. Además, es imprescindible el uso de un soporte con acceso a Internet, preferentemente un móvil, pero también vale un ordenador o tablet, ya que a través de la página del juego podremos solicitar pistas y dar nuestra solución al crimen.

Asimismo, es aconsejable ubicarnos en un espacio amplio, puesto que fácilmente la mesa va a acabar llena de documentos de interés, que inspeccionaremos más de una vez durante la partida. E incluso, el panel de sospechosos lo deberemos colgar en la pared, para no perderlo de vista en ningún momento, atando cabos de una manera más visual.

Y finalmente, con todo listo para convertirnos en los detectives del caso La diadema escarlata, abrimos el sobre que hemos recibido con toda la información recabada hasta el momento, para que nuestros ojos y cabezas deductivas le den lógica al caso mostrado. Podemos sacar y mirar todos los componentes con tranquilidad y sin miedo a un spoiler, pues la resolución del caso es completamente online.

Leyendo las primeras palabras de este nuevo caso

¿Cómo se juega a La diadema escarlata?

El objetivo del juego de deducción La diadema escarlata de Hidden Games es descubrir al culpable del robo y encontrar la pieza perdida de gran valor, analizando pruebas, pistas y testimonios que nos harán atar cabos y averiguar el hilo suelto del caso. En este sobre, recibiremos parte de la información, pero hay otra que debemos conseguir con nuestros esfuerzos como detectives, usando la lógica y la investigación.

Para llegar a la resolución de este enigmático caso, tendremos que encontrar la respuesta a estos 4 interrogantes, que nos harán descifrar los enigmas del robo en Villanueva de la Matanza:

  1. ¿Dónde tiene lugar un importante encuentro?
  2. ¿Quién es la persona que, clandestinamente, encarga el robo?
  3. ¿Qué os dice el hallazgo de la vitrina?
  4. ¿Quién ha robado La diadema escarlata?

Para lograr las soluciones de estos misterios, es crucial trabajar en equipo entre los jugadores, examinando cada uno todas la pistas recibidas. Pues, como siempre se ha dicho, cuatro ojos ven más que dos, y si son más mejor, transmitiendo diferentes hipótesis del caso con visiones diferentes que permitan su resolución.

Fin de la partida

La partida acaba cuando creamos que podemos responder a las 4 preguntas que nos indica el juego, siendo la última señalar al ladrón o ladrona de la joya. Como he comentado, la resolución se realiza de forma online a través de la página de Hidden Games, concluyendo el caso con un audio en el que nos explican de forma detalladas todos los tejemanejes que escondía el crimen.

¿Cómo se juega a La diadema escarlata?

Reseña del juego de mesa La diadema escarlata

En el 2º caso de Hidden Games nos enfrentamos a un misterioso robo, durante la Larga Noche de los Museos de Villanueva de la Matanza. La codiciada diadema escarlata ha desaparecido y nada ha podido ver al responsable del delito. Nos volvemos a poner en la piel de detectives privados que colaboran con la policía en busca de resolver este enigma de investigación y deducción. Comenzamos el reto, sacando todos los documentos del sobre, colgando el panel de sospechosos y recibiendo una llamada de teléfono.

En esta aventura a modo de Escape Room de papel y móvil en casa, nos enfrentamos a múltiples pistas en físico y online, pero desordenadas y sin sentido en un principio, las cuales debemos analizar y conectar para ir recopilando datos del robo y de los sospechosos. De esta forma, podemos disfrutar de la experiencia de un juego de deducción y resolución de un caso desde el hogar, de una manera cómoda y más económica.

Sin embargo, es cierto que la experiencia no es la misma, ya que la inmersión en el caso depende más de nosotros, en nuestras manos está transformarnos en verdaderos investigadores privados que se mueven entre documentos y señales sospechosas por la red, sumergiéndonos en el caso a resolver. No obstante, si no somos tanto de experiencias de rol, interpretando un personaje, disfrutaremos del juego al resolver sencillos puzles de lógica, que hilan información entre sí, y al deducir conexiones con nuestras hipótesis.

Para los jugadores, que disfrutaron el caso anterior de Hidden Games: El crimen de Quintana, mencionar que van a encontrar un juego bastante similar, con la misma forma de dar pistas y modus operandi, pero con otros personajes en escena que habrá que investigar y analizar en detalle. Pero, en mi opinión, este aspecto ha hecho que a pesar de encontrar una historia que me ha gustado, me ha dejado un tanto frío el caso, ya que me ha recordado demasiado al anterior, sin ningún componente especialmente diferente, ni llamativo que le alejase del otro caso.

A pesar de ello, esto no quiere decir que no hayamos disfrutado del caso, al contrario hemos disfrutado de este juego narrativo, tanto de la historia como de su resolución. Así como, comentar que lo hemos vuelto a disfrutar en pareja, puesto que consideramos que los juegos de este estilo, deducción como los Exit o Sherlock, son mejor a menos número de jugadores, al estar más controlado el flujo de información e hipótesis. Aunque el juego de La diadema escarlata escala bien a cualquier número de jugadores, pero resaltar la importancia de una buena comunicación entre lo jugadores, lo que se suele conseguir con un número más reducido de integrantes en el caso.

Sin hacer spoilers, hablaros de que para nosotros, amantes de los Escape Room, fue una resolución bastante sencilla, únicamente con un par de aspectos dudosos, apostando por una hipótesis con algún cabo suelto. Sin embargo, acertamos con todos los interrogantes, así que el consejo que os doy es que penséis que todos los documentos dan pistas útiles, a pesar de que en un principio no le veamos la información relevante. Y, también, indicar que es vital ir descartando posibles flecos en la investigación, hasta llegar a la única salida posible, poniendo en juego nuestras capacidades lógicas y de relación.

Si ya tenemos bagaje con el anterior crimen, quizás os resulte fácil. Si no es así, mencionar que son casos totalmente independientes que se pueden jugar por separado y en cualquier orden, únicamente no conoceremos al comisarios que nos da la bienvenida al nuevo caso sin resolver.

¿Seremos capaces de resolver el caso?

Pros

  • Escape Room en casa: como he mencionado, nos encontramos con un Escape Room de papel y móvil desde el hogar. Por tanto, disfrutaremos de una manera confortable de la resolución de enigmas, convirtiéndonos en detectives privados que buscan al ladrón o ladrona de guante blanco.
  • Sencillo: lo recomiendo especialmente para los jugadores que se quieran iniciar en este tipo de juegos de deducción y resolución de un caso a través de pistas. Podemos disfrutarlo en familia, con puzles lógicos asequibles y una conexión palpable entre elementos. Y, contamos con una sección de pistas o ayuda para cada componente o aspecto del juego, para evitar estancarnos.
  • Historia hilada: nos encontramos con un juego narrativo en el que todos los personajes y elementos de la historia, al llegar a su resolución cobran sentido, haciéndonos entender cada detalle que se ha dado durante la partida. Cuando acabemos entenderemos qué ha ocurrido, si no hemos logrado resolverlo de forma correcta.

Contras

  • Similar al 1º caso: este juego mantiene la esencia del juego El crimen de Quintana, compartiendo formato y modo de juego. Si os gustó el anterior título, este también lo hará, pero sin sorprendernos demasiado.
  • Caso único: como todos los juegos de resolución, una vez resuelto no se puede volver a jugar. Así que, si quieres prestarlo te aconsejo realizar las anotaciones en una hoja de papel a parte, para no hacer spoiler a los siguientes jugadores. Por ello, un juego de usar y pasar.
  • Audios demasiado largos: un aspecto negativo que encontramos durante el juego fue los audios que nos ofrecían datos, en nuestra opinión demasiados extensos. Nos obligábamos a volver a escucharlos para anotar los datos del principio o pararlos por partes para recopilar la información relevante. Además, mencionar que trae bastantes textos que debemos también leer y releer con atención.

Mi veredicto

En este nuevo caso La diadema escarlata de Hidden Games, nos volvemos a enfrentar a un enigmático crimen, el robo de una preciada y valiosa joya durante su exposición al público en un conocido museo. Como detectives, está en nuestras manos revisar pistas, documentos e interrogatorios para encontrar a los responsables del delito, con un juego narrativo y deductivo en el que demostrar nuestras habilidades lógicas. No obstante, es un juego muy similar al anterior, así como tiene un nivel asequible en las deducciones y puzles propuestos. Por estas razones, La diadema escarlata se lleva mi emblema de juego aprobado.

Este juego de mesa no está mal, al menos probadlo
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