Cosmopulpo, un juego de invocación y construcción de motor

Sabemos que el espacio aún nos guarda múltiples misterios y secretos, como seres poderosos y divinos. Existen fieles devotos al Gran Ser de Tinta o Cosmopulpo, un octópodo celestial que posea la sabiduría de todos los planetas. A pesar de que para muchos es una leyenda, que no puede ser real, otros en cambio persiguen manifestaciones y señales por todo el planeta. Nosotros como fervorosos seguidores, no solamente nos conformamos con descubrir pistas de su presencia, sino que confiamos tanto en su existencia que queremos invocarlo y lograr que se una a nosotros. Pero, llamar su atención no será fácil. ¿Quién será el más astuto y persistente discípulo del gran Cosmopulpo?

Cosmopulpo es un juego de mesa de la editorial Maldito Games. En él, gestionamos recursos, construimos nuestro motor y recopilamos tentáculos, para demostrar nuestra lealtad a este pegajoso ser. Esta adoración se convierte en una carrera entre fieles, que quieren clamar por el poderoso pulpo antes que nadie y así, ganarse su favor divino.

Preparación de partida

Para comenzar la partida a Cosmopulpo creamos el «tablero» de acciones, tomando las 8 losetas básicas y 1 loseta especial al azar de las 4 losetas especiales del Reino de Tinta. Se mezclan y formamos una cuadrículas de 3×3.

La cabeza del Gran Ser de Tinta se coloca en la loseta con +3, mientras que sus múltiples tentáculos los ponemos en un lado para formar la reserva. Asimismo, formamos un almacén de los 4 tipos de recursos disponibles, junto a sus multiplicadores, y las 4 losetas de Conocimiento Prohibido boca arriba.

Las cartas de Devoto se barajan y creamos un mazo, que se coloca boca abajo, del cual revelamos 3 cartas para crear una fila de robo a modo de suministro. Por otro lado, las cartas de primer contacto se dejan aparte y visibles.

Y finalmente, a cada jugador se le entrega 5 cartas de devoto, 2 recursos de cada tipo, 1 loseta de invocación (cara sin iconos boca arriba) y un carta de referencia. Se elige el jugador inicial al azar y el resto toma la ficha de descuento genérico que le corresponda, el segundo jugador la de 1, el tercero la de 2 y el cuarto la de 3.

Con ello, ya estaríamos listos para jugar una partida a Cosmopulpo.

¿Cómo se juega a Cosmopulpo?

Nuestro objetivo en Cosmopulpo es conseguir los 8 tentáculos antes que el resto de fieles competidores. Para ello, debemos crear un buen motor de desarrollo con las carta de devoto que bajemos a nuestra zona de juego. Además de gestionar con estrategia nuestros recursos y cartas, tendremos que movernos con astucia en la cuadrícula con las losetas de acción, para realizar los movimientos más óptimos en cada turno.

La partida de Cosmopulpo se desarrolla a lo largo de un número indeterminado de turnos. En su turno, el jugador activo resuelve los siguientes 3 pasos:

1. Mover el Cosmopulpo: esta fase es obligatoria, desplazando la cabeza del Gran Ser de Tinta por el Reino espacial en octogonal 1 espacio, nunca en diagonal. Si quiere llegar más lejos, tendrá que gastar 1 recurso por cada loseta extra que quiera moverse, pero no puede volver a su loseta de origen. De esta forma, obtiene la recompensa o beneficio impreso de la última loseta.
2. Jugar una carta: de manera opcional, puede jugar 1 carta de su mano, previo pago de un coste de recursos indicado en la esquina superior izquierda de la misma. Hay 4 tipos de cartas, cada una de las cuales tiene un tipo de habilidad distinta y que diferenciaremos por su color y marco:
   • Escrituras (negras): mejoras permanentes que otorgan descuentos de recursos.
   • Reliquias (amarillas): son también permanentes y se relacionan con la obtención de recursos.
   • Alucinaciones (rojas): efectos variados de un solo uso. Si tienen un rayo permiten además jugar una carta adicional si tiene los recursos necesarios para pagarla.
   • Constelaciones (azules): deben ser completadas con próximos recursos obtenidos y siguiendo un orden concreto. Una vez completada, el jugador recibe 1 tentáculo y un efecto inmediato de un solo uso.
3. Descartarse: al final de su turno, el jugador no puede tener más de 8 recursos ni 8 cartas en su mano. En caso contrario, descarta el excedente para no superar ese límite.

Para cambiar de turno, debemos girar la cabeza del Gran Cosmopulpo hasta el siguiente jugador activo, salvo que hayamos conseguido 8 tentáculos, en ese caso pasamos inmediatamente al fin de partida. Los tentáculos los podemos ganar con las cartas de constelación, de alucinación o incluso 2 a la vez con el conocimiento prohibido, descartando 13 recursos y ganando su correspondiente loseta. A su vez, elegimos 1 carta de primer contacto cuando obtenemos nuestro primer tentáculo, robando cada jugador una de ellas, pero el primero tendrá más opciones.

Fin de la partida

La partida a Cosmopulpo termina inmediatamente cuando un jugador obtiene 8 tentáculos, cogiendo la cabeza del Gran Ser de Tinta y colocándola en el centro de su loseta de invocación. Así, abrirá el portal con el reino oculto.

Reseña del juego de mesa Cosmopulpo

En la secta de adoración al Cosmopulpo, se asegura que quién consiga invocar al Gran Ser de Tinta será bendecido con grandes recompensas que lo colmarán de gloria y poder. Por tanto, sus súbditos han comenzado una competición por recopilar la mayor cantidad de indicios y pruebas que les ayude a la realización del ritual. Vamos a demostrar que nuestra adoración por el gran octópodo es la más fervor. Así, viviremos una carrera de gestión de recursos y acumulación de cartas para traer a este ser celestial a nuestro universo.

Cosmopulpo es un juego de construcción de motores sencillo, en el que iremos jugando cartas para ir progresando, pudiendo desarrollar diferentes estrategias con las que mejorar nuestra fluidez en la partida. A pesar de que cada jugador puede tomar diferentes rumbos con sus elecciones, es fundamental completar cartas de constelación que serán las que nos ayuden a conseguir tentáculos. Sin embargo, el resto también son importantes para avanzar, las negras reducen costes de construcción, las amarillas aumentan los recursos que se generan, mientras que las rojas son más diversas y potentes, pero de uso instantáneas, no recurrente.

Un aspecto clave que ofrece gran rejugabilidad a las partidas es el tablero modular por losetas, que nos permite crear diferentes combinaciones en cada partida, haciéndolas diferentes entre sí. E incluso, existen diseños alternativos de menor a mayor dificultad, para hacer más exigente la planificación de los movimientos de la cabeza del pulpo para la elección de la acción principal. La cual es determinante al inicio de la partida, pero que va teniendo menos peso conforme progresamos en nuestro motor de cartas.

En Cosmopulpo la disputa entre jugadores es constante, desde la elección de losetas y cartas hasta la obtención de tentáculos. Como la partida acaba cuando un jugador consigue 8, tampoco nos durmamos generando el mejor motor, si alguien se nos está adelantando, debemos tener un ojo puesto en el progreso de nuestros rivales, para que no nos adelanten por la escuadra, cuando creemos que estamos dominado la partida. Y, para ese adelantamiento acelerado, suelen ser muy útiles las losetas de conocimiento prohibido, que nos dan 2 tentáculos de un asalto.

Asimismo, es crucial combinar bien nuestras cartas para aprovechar al máximo los beneficios que vamos obteniendo con ellas. De esta forma, aceleramos nuestro progreso en la invocación del Gran Ser de Tinta. A la vez que la elección de la carta de primer contacto nos da otro buen empujón, siempre que saquemos su mejor rendimiento, siendo algunas más valiosos a posteriori y otros en el mismo momento. Por tanto, habrá que tomar decisiones durante toda la partida, aunque no sean tan determinantes, ya que se puede reconducir la estrategia fácilmente por otras vías si nos equivocamos en la elegida, siendo un juego de corte familiar.

Este juego de mesa escala bien a cualquier número de jugadores, pero considero que su mejor número es a 2 jugadores, reduciendo los entreturnos, sin perder la interacción. No obstante, a más jugadores la disputa es mayor, pero no se podrá controlar tanto la estrategia de posicionar la cabeza del pulpo con miras a nuestro próximo turno.

Además, proporciona una alternativa para jugar en modo solitario y cooperativo con la incorporación del personaje detective privado, jugando en competición con este. Para aumentar su rejugabilidad, ofrece también la variante puente cósmico que une losetas de acción en diversas combinaciones, creando nuevas opciones de desplazamiento en el tablero principal.

Cosmopulpo es un juego de mesa llamativo por su estética y diseño, con figuras rosas del Gran Señor de Tinta, con su cabeza y tentáculos, que destacan entre sus losetas de culto oscuras, junto a un bonito diseño gráfico de estilo retro en sus cartas. De esta forma, nos transporta al mundo de los cultos ocultos en nuestra sociedad, una temática que atrapa a muchos jugones.

Pros

• Diseño: un juego de mesa que destaca desde su portada, llamando la atención con su dios pulpo de temática Cthulhu, con un ser celestial más family friendly que amenazador, y también cuenta con unos cuidados componentes en su interior.
• Sencillo: tiene como principal mecánica la construcción de motores, tomando decisiones durante toda la partida. Sin embargo, se puede llegar a la obtención de los tentáculos con diferentes vías, por lo que existen múltiples estrategias, sin mucha penalización al error.
• Carrera: la sensación de tensión se siente al producirse el final de partica en Cosmopulpo cuando un jugador cierre con 8 tentáculos el portal, por lo que tendremos que tener un ojo en nuestra planificación y otro en los avances de los rivales.

Contras

• Duración: la partida se puede alargar más de lo necesario si no aparecen las cartas requeridas para progresar en nuestra estrategia, aunque una buena opción, aunque no fácil, es acumular recursos para conseguir losetas de conocimiento prohibido.
• Azar: la aparición de las cartas en el mercado puede favorecer a unos jugadores con respecto a otros, pero algunas acciones o cartas nos permiten limpiarlo con mayor agilidad.
• Variabilidad: la variante que incluye el juego base solamente afecta al tablero modular de acción principal, mientras que nuestra misión será siempre la misma, obtener 8 tentáculos antes que nadie, sin ningún otro objetivo individual u secundario.

Mi veredicto

Cosmopulpo es un juego de mesa de construcción de motores, siendo un eurogame ligero de corte familiar, que consiste en combar cartas y gestionar recursos para poder conseguir los 8 tentáculos que nos permitan evocar al gran dios pulpo. Un juego sencillo e interactivo, que destaca por su llamativo diseño y estética, pero que para los jugadores más expertos quizás se le quede algo corto. Por todas estas razones, y las comentadas en la reseña, Cosmopulpo recibe mi emblema de juego recomendado.