El interés del ser humano por descubrir nuevos rumbos, está presente desde sus orígenes. Y es que desde la Prehistoria, los primeros Homo Sapiens que colonizaron el planeta tuvieron el instinto de explorar en busca de alimento, refugio y nuevos descubrimientos. Siendo fieles a la historia, partiremos de África, región donde se han descubierto nuestros ancestros más antiguos, para continuar expandiendo nuestros asentamientos por Europa, América, Asía y Oceanía. Realizamos un camino nómada, pues los peligros acechan y la comida escasea, lo que nos permite descubrir nuevas vegetaciones y animales, desplazándonos continuamente de un lugar a otro, sin descanso.
Catan: el despertar de la humanidad, es un juego de mesa de la editorial Devir Iberia, en el que se lleva a cabo una renovación del clásico Catan. No pierde la esencia del juego base, pero se adapta a la temática con colonizaciones nómadas y un tablero más amplio sobre el que expandirse, añadiendo a su vez nuevas formas de lograr puntos de victoria (PV) y diversos tracks de progreso. Vamos a conocer esta nueva entrega del universo Catan, con un viaje a nuestro pasado, concretamente al origen de la humanidad.
Número de jugadores: | 3 – 4 |
Duración: | 90 minutos |
Edad mínima: | 12 años |
Género: | dice rolling grid movement |
Complejidad: | 2,75 / 5 |
Editorial: | Devir Iberia |
Diseño: | Klaus Teuber Benjamin Teuber |
Ilustración: | Quentin Regnes |
Precio recomendado: | 40,46€ |
Índice
Preparación de partida
Para empezar la partida a Catan: el despertar de la humanidad, tenemos que desplegar el gran tablero de juego, eligiendo la cara según seamos 3 o 4 jugadores, tomando como guía los osos polares representados en la parte superior derecha.
Sobre el tablero, aparecen los diferentes continentes y su distribución durante esta época prehistórica, así como los tipos de terrenos disponibles, distinguidos por colores (bosques, yermos, praderas y montañas). En cada región hexagonal, se encuentra fijado un número, representado en dos colores y tamaños. Estas características indican la probabilidad de que salgan estos números, en tiradas con 2 dados de 6 caras (6D). El color rojo y tamaño grande representa altas probabilidades de que el número salga, mientras que color negro y pequeño se reducen las posibilidades de que surja dicha combinación.
En la mayoría de continentes los números de los hexágonos son invariables, salvo en África dónde la numeración no está establecida de antemano, por lo que se colocan fichas de número. En partidas de principiantes, el reglamento propone la disposición más equilibrada, pero para expertos se puede optar por una combinación aleatoria.
Las figuras grises que simbolizan las amenazas, con la representación de un neandertal y un tigre de dientes de sable, se sitúan al norte del mapa en los glaciales, concretamente sobre Europa y Asia respectivamente. Se moverán según los dados y las acciones de los jugadores por estas zonas.
Después, se distribuyen las fichas de emplazamiento según se indican en el tablero, sobre algunas encrucijadas de los terrenos hexagonales, correspondiendo un color y recurso a cada continente. Asimismo, hacemos lo mismo con las fichas de exploración, las cuales representas animales de dichas zonas, que podemos cazar durante la partida. Iguales a estas, pero de mayor tamaño, están las fichas de puntos de caza, que se colocan en las nubes que comparten su forma. Otras fichas que no se disponen en el tablero, pero que están al alcance de los jugadores para obtenerlas según alcancen ciertos retos, son las fichas de caza y recolección eficiente.
Por otra parte, cada jugador elige su color de juego, después situamos 3 campamentos y 1 explorador inicial en la región de África. En las primeras partidas se recomienda seguir la disposición que el reglamento propone, pero cuando dominemos más el juego, esta colocación se puede hacer con total libertad, pero siempre en terreno africano. A su vez, todos los jugadores reciben del suministro de materia prima (formado por un portacartas con cartas de piel, hueso, carne y piedra): 1 piel y 1 hueso, estos recursos formaran su reserva inicial.
Finalmente, ubicamos al alcance de todos los 4 marcadores de progreso, poniendo la figura más pequeña de nuestra color en la casilla inicial. Mientras que en la última, se colocan las fichas de PV extra convenientes según el tipo de progreso. Con todo listo, tiramos los dados para determinar quién será el jugador inicial.
¿Cómo se juega a Catan: el despertar de la humanidad?
Nuestro objetivo en Catan: el despertar de la humanidad es conseguir 10 puntos de victoria (PV) , antes que el resto de contrincantes, explorando el mundo durante la época del Paleolítico. Seremos auténticos nómadas a favor de nuestra supervivencia en materias, compitiendo con otras tribus por el dominio de las mejores tierras.
En cada turno, el jugador activo realiza las siguientes fases:
1) Producción
Se lanzan los 2 dados y se realiza la suma de ambos valores para determinar el número obtenido. Dicho resulto activa las losetas de hexágono del tablero correspondientes. Por ello, los jugadores que tengan un campamento en algunas de las esquinas de esos hexágonos, roban 1 carta de materia del recurso indicado por el terreno. Se puede producir con varios emplazamientos, por lo que recibimos el mismo número de materias, qué campamentos tengamos en territorios con ese número.
Si con la tirada de dados se forma el número 7, no se produce, si no que se avivan las amenazas. En primer lugar, se comprueba que nadie tenga en su mano más de 7 cartas, de ser así debe descartarse hasta tener la mitad, redondeando hacia abajo, por ejemplo si tiene 9, se queda con 4. Luego, el jugador activo puede elegir entre coloca al neandertal en 1 loseta de hexágono de Europa o Asia, o al tigre en América u Oceanía. De esta forma, roba 1 carta a ciegas a algún rival que tenga un campamento en esa región, además de bloquearla hasta que la figura sea reasignada.
2) Acciones
Después de recopilar la mercancía obtenida en la tirada de dados, se puede llevar a cabo estas acciones:
- Comerciar, tanto con el resto de adversarios, realizando intercambios de materia primas a través de acuerdos; como con la reserva, entregando 3 tipos iguales para coger una carta del necesitado, es decir, un 3×1.
- Explorar. Se puede situar un nuevo explorador en una encrucijada adyacente a uno de nuestros campamentos, gastando 1 piel y 1 carne. Esto se produce si se encontraba fuera del tablero o en una ubicación no deseada. O se pueden mover nuestras figuras disponibles sobre el tablero, entregando como requisito 1 carta de carne o piel, el alcance inicial es de 3 pasos, pero se puede ir avanzando hasta un máximo de 7 encrucijadas. Su camino no es bloqueado por otras piezas, pero el destino final debe estar desocupado. Algunos aspectos a considerar en esta acción, es que el estrecho de África-Europa no se puede cruzar y que podemos mover a nuestros 2 explorados en el mismo turno, pagando el coste por cada uno, pero solamente una vez.
- Crear nuevo campamento. Si tenemos un explorar en una casilla con ficha de emplazamiento, pagando 1 piel, 1 hueso y 1 piedra, se puede transformando en un campamento. El explorar abandona el tablero, pero a cambio ya podemos recibir materias de ese territorio y 1 PV con la ficha. Solamente tenemos disponibles 6 figuras de hogar, por lo que durante la partida, tendremos que ir restructurándolas para conseguir más PV. Se recomienda empezar la desocupación por África.
- Avanzar en los marcadores de progreso. Según nuestros intereses, vamos pagando recursos para subir de nivel en estos. Quién alcance el último puesto en primer lugar, recibe 1 PV en cada uno. Son de 4 tipos: ropa y construcción (que nos ayudan a desplazarnos por otras regiones y a adquirir fichas de exploración o animales, hasta ese momento inalcanzables), comida (aumenta el número de pasos posibles de nuestros exploradores) y caza (reubicamos una de las amenazas a otra casilla, pudiendo robar 1 carta a otro jugador, como el efecto normal de estas figuras).
De esta forma, avanzamos en nuestro descubrimiento del mundo prehistórico, a la vez que recopilamos PV con nuestras hazañas en el terreno. En resumen, conseguimos aumentar nuestras posibilidades de victoria con la construcción y, por tanto, adquisición de fichas de edificación, caza y recolección eficiente, de progresión y de algunos animales cazados.
Fin de la partida
La partida a Catan: el despertar de la humanidad acaba cuando un jugador ha alcanzado 10 PV o más, lo que produce el fin inmediato, sin acabar el turno del resto de jugadores. Esto indica que nuestra tribu ha sabido adaptarse mejor al nuevo mundo que se abre ante ellos, manteniendo su supervivencia.
Reseña del juego de mesa Catan: el despertar de la humanidad
Catan: el despertar de la humanidad es un juego de mesa de temática prehistórica, que intenta ser relativamente fiel a la historia de nuestros orígenes como Homo sapiens. En el reglamento se explica el sentido de los diversos elementos utilizados, para comprenderlos mejor en ese contesto histórico.
Aquí, descubrimos que el Homo sapiens parte de África, estableciendo sus primeros asentamientos y considerando este continente el nido del hombre moderno. Sin embargo, su instinto nómada de supervivencia les incita a explorar nuevas regiones, en busca de alimento y refugio, por lo que nos desplazaremos por el tablero en un éxodo o migración para recolectar frutos y cazar diversas especies en otros continentes, aún sin explorar. Mientras, el continente africano se va secando, convirtiéndose principalmente en un desierto conforme avanza la partida, por lo que tendremos que ir desocupándolo de manera progresiva.
Esta nueva entrega es independiente del Catan clásico, convirtiéndonos de nuevo en colonizadores, pero esta vez de una manera más rústica y errante. Pues, estaremos en continuo movimiento por terreno de juego, prosperando y adaptándonos para sobrevivir, a la vez que competimos con el resto de clanes rivales por la explotación del terreno. La dinámica de juego es similar al clásico Catan, tiramos los dados, recopilamos materias primas según los hexágonos que dominemos, comerciamos si el resto están dispuestos o sino con la banca, y realizamos acciones con los recursos de nuestra mano para progresar. Con el objetivo de lograr 10 PV, en una carrera frente al resto de contrincantes.
No obstante, existen grandes diferentes entre ambos títulos. La principal es que las figuras colocadas en el tablero son móviles. No hay ni puentes, ni poblados, ni ciudades que una vez situadas en el mapa son inamovibles. Al contrario, contamos con 2 exploradores y 6 campamentos para toda la partida, que según nuestras necesidades y posibilidades iremos desplazando para ocupar diferentes zonas del amplio tablero del que disponemos en Catan: el despertar de la humanidad.
De esta forma, se evita quedar bloqueados o atrapados por otros jugadores en una zona, al no existir requisitos de conexión entre campamentos. En el clásico, era bastante común que algún jugador viera limitadas sus posibilidad de construcción, haciendo que su partida se volviera cuesta arriba. Este aspecto, hace que este nuevo título sea más amigables y accesible, ya que no sanciona tanto los errores de colocación, o desplazamiento táctico.
Por otra parte, la forma de conseguir PV también varía, al construir edificaciones ambulantes, el peso de la puntuación la toman las fichas de exploración, que se consiguen cuando intercambiamos un explorador por un campamento, así como también se incluyen otros puntos extras al alcanzar ciertos logros. Estos PV son generalmente intransferibles a otros rivales, excepto el emblema de mejor cazador (2PV) que puede ser robado si se aumentan el número de animales cazados, que el jugador que lo posea en dicho momento.
Lo que realmente echo en falta son las tarjetas de eventos, que ofrecían un factor sorpresa y abrían una nueva puerta estratégica en la partida. Este juego a cambio introduce 4 marcadores o tracks, con cuya evolución obtenemos importantes beneficios, en ocasiones incluso esenciales para nuestro éxito en la partida. Si sabemos sacarle el adecuado provecho a las posibilidades que nos bridan.
Como he comentado, en Catan: el despertad de la humanidad, el terreno de juego es más amplio. Por ello, se usan 2 amenazas, anteriormente conocido como ladrón, para inactivar más losetas cuando la tirada de dados sea de 7 o se avance en el track de caza. Asimismo, no todas las regiones están disponibles desde un primer momento, tendremos que conseguir ropa y construcciones (tracks de progreso) para desplazarnos con mayor libertad por el tablero. Y, no nos olvidemos, que las fichas de exploración, frutos y animales no se reponen, por lo que si tenemos el ojo puesto en alguna, tendremos que ser más rápidos que el resto con nuestros exploradores.
Estas modificaciones dan frescura y renuevan al juego base, abriendo nuestras posibilidades de exploración y decisión, mas considero que algunas reducen la interacción entre jugadores. Pues, la disputa entre adversarios no es tan dura, haciendo que el juego sea más amigable, pero también menos tenso, al no bloquear o cortar las alas en el terreno. Esto no quiere decir que no hay competencia directa, este aspecto se mantiene con la lucha por los puntos de la última casilla en los tracks, la eliminación de losetas en África o la adquisición de las disputadas fichas del tablero.
Con el posicionamiento cambiante de este título, se logra que no sea tan transcendente la colocación de figuras que realizamos al comienzo del juego, como ocurría en el Catan clásico. Pero, claro, igual que el anterior, es fundamental que nos fijemos en los números que vamos ocupando, procurando no repetirlos y que sean las opciones con mayor probabilidad en los dados, ya que esto puede marcar la obtención de materiales. Puesto que, aunque existe la posibilidad de reubicar campamentos una vez estén todos construidos, cada edificación tiene un coste, nada es gratis en este juego. Por tanto, a pesar de que Catan: el despertar de la humanidad intente compensar las malas decisiones que se pueden tomar, estas nos siguen afectando, por el hecho de ser una una competición a contrarreloj con los demás.
Pros
- Accesible: este juego de mesa es de corte familiar, siendo ideal para sacar a mesa con jugadores que se inician en este mundo o principiantes. Nos hace sentir que vamos avanzando en nuestra conquista en todo momento, aunque no seamos los más rápidos en el proceso. Y, nos ofrece diferentes vías para utilizar los recursos recopilados.
- Clásico renovado: este Catan con el despertar de la humanidad conserva la esencia del juego base, colonizando territorios con nuestros desplazamientos y gracias, a las afortunadas tiradas de dados. Así como, sigue siendo fundamental saber colocarnos bien, aprovechar los recurso recolectados y comerciar con elocuencia. Sin embargo, como aliente, seremos un poblado nómada, por lo que nuestros emplazamientos no son fijos en el tablero. Por ello, es una reforma que modifica al juego, pero no nos hace olvidarnos del original.
- Sin bloqueos: en esta entrega no se realizan tantos bloqueos entre jugadores, por lo que la experiencia de juego es más amena. La eliminación de los puentes fijos y ciudades, nos permite movernos sin tantas restricciones por los diferentes continentes.
Contras
- Azar: en el juego dependemos completamente de las tiradas de dados que se realicen, ya que disponer de materias primas es esencial para progresar. Por ello, si la fortuna no está de nuestra parte, nos alejaremos sin frenos de la victoria, sin darnos posibilidades de hacer frente a la sequía de recursos. Dando lugar incluso, a que en más de un turno, no podamos hacer nada. Este aspecto, se suele corregir en los juegos más actuales, ofreciendo alguna posibilidad de acción aunque sea menos rentable.
- Lectura mapa: con al ampliación de terreno y los campamentos variables es más complejo quedarnos con nuestras ubicaciones en cada momento, siendo habitual algún que otro despiste. Por ello, debemos abogar por el fair play e ir avisando al resto. Además, hay algunas restricciones que no se indican claramente en el tablero, como la prohibición de pasar de África a España, que las amenazas no pueden colocar en África o que desde Oceanía a pesar de la aparente cercanía visual no se puede llegar a América. Esto hizo rectificar o entorpecer algunas estrategias de los jugadores.
- Variabilidad: al tener el tablero impresas las losetas de terreno y su numeración, salvo en África, se reducen las posibilidades de diferentes distribuciones, lo que sí ofrecía el juego base. Posiblemente sea para hacer el terreno más equilibrado y distribuir las materias primas por todos los continentes, pero esto disminuye notablemente la variación en las partidas.
Mi veredicto
Y con esto cerramos la reseña de Catan: el despertar de la humanidad. Un juego familiar de iniciación que como el clásico, suele enganchar a los jugadores nobeles, al poseer un sistema de juego sencillo, rápido e interactivo. Además, en esta entrega se facilita que ningún jugador se quede bloqueado o tan descolgado, ofreciendo múltiples alternativas para desplazarnos y colonizar, haciéndolo más amigable. Sin embargo, no debemos olvidar que estamos ante una carrera, en la que el azar está muy presente, lo que puede llegar a desquiciar a algunos. Un clásico que no pasa de moda, aunque se quede corto para los más expertos. Por estas razones, se merece mi emblema de juego de mesa recomendado.