Camping Life, un juego entre tiendas de campaña

Ir de acampada es una estupenda forma de salir y desconectar del día a día, de escapar de la rutina mientras los visitantes disfrutan de parajes únicos rodeados de naturaleza. Ahora, con el verano llamando a la puerta, estamos pensando en las distintas opciones que hay cerca para montar nuestro propio camping. Los hay en la playa, en la montaña y en otros lugares que no os podéis ni imaginar, ¿y sabéis qué? ¡No cabe ni un alfiler! Parece que la demanda está por las nubes y, si nos ponemos las pilas y nos lo curramos, seguro que somos capaces de construir no solo un bonito camping, sino el más completo de la región.

Camping Life es un juego de mesa de la editorial Cacahuete Games, en el que nos pondremos manos a la obra para hacer un espectacular camping. Con sus zonas arboladas, piscinas, hogueras, bungalows y tiendas de campaña. No le faltará de nada… ¿o tal vez sí? Se rumorea que, no muy lejos de aquí, hay un listillo al que se le ha «ocurrido» la misma idea. Me da la impresión que nos vamos a tener que rascar el bolsillo si queremos llevarnos los mejores terrenos para levantar un camping top.

Preparación de partida

En primer lugar, hacemos un mazo de robo con las cartas de misión. Revelamos las 2 primeras, que dejamos en el centro de la mesa para que ambos jugadores puedan verlas, y entregamos una adicional a cada jugador, quienes pueden verla sin mostrársela al otro. Por lo que habrá 2 misiones públicas y 2 secretas, una por jugador.

A continuación, formamos un segundo mazo con las cartas de terreno. En este caso tomamos 4 cartas para crear la que será la zona de ronda actual. Posteriormente, cogemos otras 2 cartas y las dejamos boca arriba junto a las misiones públicas, esta será la zona de próxima ronda.

Entregamos a cada jugador 6 discos de un color y una carta de referencia, con lo que ya estaríamos listos para jugar a Camping Life.

¿Cómo se juega a Camping Life?

Nuestro objetivo en Camping Life es lograr que todo el mundo se lo pase en grande en nuestro camping, y para hacerlo necesitamos construir un sitio de acampada que cubra las necesidades de los visitantes.

La partida transcurre a lo largo de un número indeterminado de rondas, hasta que un jugador termina su área de juego de 4×3 cartas. Cada ronda se divide en 2 fases que jugaremos de forma simultánea.

Fase de pujas

Empezando por el jugador inicial, nos turnaremos para poner en juego 2 de nuestros 6 discos. Uno boca abajo sobre una de las cartas de terreno de la zona de ronda actual y el otro boca arriba frente a nosotros. No hay restricciones de colocación, por lo que podemos poner un disco en una carta sobre la que ya haya jugado el oponente o incluso nosotros.

De este modo, nos iremos alternando para jugar discos de nuestra mano hasta que cada uno juegue sus 3 turnos, es decir, hasta que se queden sin discos.

Tras ello, comprobamos quién ha ganado cada puja. Primero comparamos los discos que se han jugado boca arriba frente a nosotros, y quien tenga más puntos se queda una carta de terreno de la zona de próxima ronda a su elección. ¡Así, by the face! Luego volteamos los discos que hay sobre los terrenos de la zona de ronda actual y revisamos quien se lleva cada uno.

Fase de construcción

Cada jugador toma las cartas que ha ganado y las coloca en su área de juego, teniendo en cuenta que:

• Tenemos que crear una cuadrícula de 4×3.
• Las cartas han de estar conectadas ortogonalmente.
• La carta gana de próxima ronda se dispone antes que las otras.

Próxima ronda

Cuando juguemos nuestras cartas, hacemos un breve paso de mantenimiento para comenzar una nueva ronda.

• Las cartas de la zona de próxima ronda pasan a la zona de ronda actual, y las de esta se retiran de la partida.
• Rellenamos los huecos restantes de ambas zonas con cartas del mazo de robo.
• Si un jugador ganó una carta de la zona de próxima ronda en la fase de pujas, se convierte en jugador inicial. Si no se mantiene el orden de juego.

Fin de la partida

Si un jugador completa su área de 4×3, se termina la ronda y pasamos al recuento de puntos de victoria (PV). Ambos jugadores obtienen puntos por:

• Los caminos que llegue a un bungalow.
• Piscina o conjunto de 2.
• Bosques adyacentes ortogonalmente a bungalows.
• Tiendas de campaña.
• Hogueras adyacentes ortogonalmente a bosques.
• Las 4 cartas de misión en juego. ¡Ojo que puntuamos también la del rival!

El jugador con más puntos habrá ganado la partida a este Camping Life.

Reseña del juego de mesa Camping Life

Camping Life se presenta como un city building exclusivo para 2 jugadores, en el cual los jugadores tratarán de construir un lugar de acampada ideal que disponga de todo tipo de comodidades. Con bungalows y hogueras rodeados de frondosos bosques, caminos que permitan el fácil acceso a los bungalows, piscinas por aquí y por allá para refrescarse, multitud de tiendas de campaña repartidas por todo el recinto y seguro que alguna cosa más se nos ocurre.

Un filler ligerito tanto por mecánicas como por complejidad, aunque tiene su miga si queremos exprimir nuestra zona de puntuación al máximo. Para ello contamos con una cuadrícula imaginaria de 4×3, a la que daremos forma con cartas de terreno que vamos a ir comprando durante la partida.

En la primera fase de la ronda vemos la mecánica principal del juego, las pujas. Este sistema por regla general no suele funcionar especialmente bien en juegos que admiten partidas a 2 jugadores. Sin embargo, Camping Life lo implementa bien gracias a las pujas semiocultas. En cada turno decidiremos qué par de discos ponemos en juego. Uno boca arriba buscando conseguir una carta extra y otro boca abajo apostando por una de las cartas del suministro. Conocer la información parcial nos ayuda a intuir las intenciones de nuestro rival, pero el faroleo con los discos ocultos hace que la tensión por saber qué nos llevamos nos tenga en vilo hasta que se revele el pastel. Si vamos fuerte a por una carta de próxima ronda, corremos el riesgo de quedarnos cortos en algunas pujas ocultas. Intentar ir a todo no es una opción, así que pensemos qué nos interesa para desarrollar nuestro camping.

Y es en la segunda fase donde ponemos las cartas sobre la mesa, pues haremos lo posible para que los terrenos, que habremos conseguido en la fase anterior, encajen bien con lo que ya teníamos previamente mediante la colocación de losetas/cartas. En Camping Life contamos con 2 métodos de puntuación. Por un lado uno fijo que controlamos, ya que cada uno de los elementos disponibles en las cartas, en función de lo que le rodee, nos otorgará una cantidad de puntos que nos aseguramos. Algunos de ellos, como los bungalows y los bosques crean sinergias con más de un elemento, lo que los hace muy apetecibles si somos capaces de combinarlos bien. Por otro lado, también están las misiones, 4 objetivos compartidos que, al igual que las pujas, no conoceremos en su totalidad. Un par de misiones son conocidas por ambos jugadores, mientras que las restantes solo las sabrá su propietario. Gran parte de estas se ganan por mayorías, lo que puede marcar la diferencia en el resultado final. No obstante, no nos obsesionemos con ellas, pues el grueso de la puntuación se concentra en los puntos concedidos por las sinergias de los terrenos que hemos comentado.

Pros

• Pujas semiocultas: la gracia del juego está en ese nerviosismo que se genera en la primera fase, donde los jugadores harán cuanto puedan por leer la mente del otro para guardarse un as en la manga.
• Sencillez: juego fácil de aprender a jugar que podemos sacar a mesa con prácticamente cualquiera y que fluye realmente bien.
• Ilustraciones: título llamativo y colorido, con imágenes claras que nos permiten visualizar bien los distintos elementos y sus combinaciones en nuestro cuadrante, e iconografía intuitiva tanto en las tarjetas de referencia como en las misiones.

Contras

• Misiones secretas: el objetivo oculto de nuestro rival se compite más por aleatoriedad que porque lo hayamos deducido.
• Disputa por no empezar: quien comienza la ronda parte en desventaja, y lo hará quien gane la carta extra, algo que me parece lógico, o si hay empate lo hará el que acaba de serlo. Esto puede propiciar que el segundo en discordia fuerce la situación al tener la última palabra, algo que no me convence y que hemos cambiado a partir de la tercera partida.

Mi veredicto

Y con esto vamos concluyendo la reseña de Camping Life, un juego de mesa sencillo que nos lleva a competir con nuestra pareja de juego por hacer el mejor camping de la región. Un juego accesible y dinámico que resalta por la mecánica de pujas semiocultas, la cual aporta un punto de tensión interesante por la compra de los 4+1 terrenos en juego. Tal vez me esperaba más de las misiones, pero si partimos de que son un complemento a la puntuación final y obviamos la misión del rival de cara a puntuarla nosotros, el título cumple. Por ello, le doy mi emblema de juego de mesa recomendado.