Bunny Hops! un party game de lo más alocado

Bunny Hops! es un juego basado en la popular app para móviles, una propuesta que da el salto al mundo de los juegos de mesa de la mano de la editorial Asmodee. En él, los jugadores se dividirán en equipos, quienes competirán en cada una de las distintas categorías para demostrar a qué grupo se le da mejor hacer mímica, describir palabras, imitar personajes, tararear y cantar canciones.

Preparación de partida

En primer lugar, desplegamos el tablero y:

• Separamos las cartas por categorías, las mezclamos por separado y formamos los distintos mazos, colocando cada uno en el espacio que le corresponda.
• Ponemos cada ficha de puntos en la casilla que hay junto a su mazo.
• Mezclamos las cartas de desafío y las situamos en el centro del tablero.

Formamos equipos, tantos como consideremos oportunos, de modo que cada uno esté compuesto de 2 a 4 jugadores.

Y con esto ya estaríamos listos para jugar una partida a Bunny Hops!.

¿Cómo se juega a Bunny Hops!?

Nuestro objetivo en Bunny Hops! es pasárnoslo pipa y, como no, ganar más puntos que los demás equipos. Para ello disponemos de 9 rondas, en las que competiremos por diferentes categorías diferenciadas por tipología y temática.

En cada ronda, los equipos jugarán turnos alternos para tratar, que uno de sus jugadores, adivine la mayor cantidad de palabras posible en 1 minuto. Para que cada ronda no la empiece siempre el mismo, se recomienda que a lo largo de la partida rote el orden de juego de los equipos.

Antes de empezar una categoría, cada equipo coge una carta de desafío. Esta muestra una regla adicional que el equipo debe cumplir mientras juega su turno.

Así, cuando le toque a nuestro equipo, teniendo en cuenta la carta de desafío y lo que se le da mejor a cada uno, escogemos quién va a adivinar. Los demás se encargarán de dar las pistas, pero procuremos, que al igual que con el orden de juego, también cambiemos los roles de los integrantes, de forma que todos prueben tanto adivinar como dar pistas.

A partir de ahí, disponemos de 1 minuto para que el jugador que adivina acierte todas las tarjetas que pueda. Cuando pongamos el tiempo, este tomará el mazo de cartas de la categoría en cuestión y se pondrá una tarjeta en la frente, de modo que él no vea la palabra pero sí sus compañeros.

Estos últimos, dependiendo de la categoría, ayudarán a su compañero a adivinar la palabra. Nos encontramos con 3 bloques de categorías:

• BunnyCharlar: explicar la palabra sin usar la misma ni otras que contengan la raíz. Presenta 3 categorías: España, celebridades y marcas.
• BunnyMímica: haciendo mímica, es decir, utilizando exclusivamente lenguaje corporal y gestual. Presenta 3 categorías: en acción, deportes y música.
• BunnySonido: usando la voz, en cada categoría tenemos que tararear la canción, imitar un personaje, animal, etc. o cantar el principio de un verso para que el compañero la siga.

Si el jugador acierta coge una nueva carta, y si falla puede seguir intentándolo o pasar, tomando también una nueva carta. Finalizado el minuto, pasamos el turno al siguiente equipo.

Cuando todos los equipos hayan jugado, comprobamos cuantas se han acertado, y el equipo que haya adivinado más palabras gana la ficha de puntos de esa categoría. En caso de empate, se hace un doble o nada, colocándose en la siguiente categoría para que el bote sea más suculento.

Tras las 9 rondas, el equipo que tenga más puntos gana esta partida a Bunny Hops!.

Reseña del juego de mesa Bunny Hops!

Bunny Hops! es un party game ligero y divertido, que es capaz de reunir alrededor de la mesa a grupos grandes, para echar un rato de risas y sin más pretensión que pasárnoslo bien, animando la velada tras la sobremesa con la familia o amigos.

Sobre el papel, un juego más de entre tantos, muy del estilo de El gran tabú, donde los jugadores, divididos por equipos, van a competir por ver quién sabe más en cada una de las categorías que nos ofrece este juego de mesa.

En cada ronda, los equipos intentarán que uno de sus jugadores adivine todas las tarjetas que pueda en 1 minuto. Para hacerlo, contará con la inestimable ayuda (o no) de sus compañeros, quienes deberán describir palabras, hacer mímica, bailar estilos de música, cantar o imitar, según lo que toque en cada ronda.

La dinámica de juego propicia a que el juego sea fluido y entretenido para todos los que estén en la sala. El que adivina, porque se romperá la cabeza por tratar de entender qué están haciendo sus compañeros. Los compañeros, porque tendrán que improvisar y ser rápidos para hacer multitud de cosas en un espacio muy reducido de tiempo. Y los demás, porque tendrán que vigilar que se cumplen las reglas básicas y morales del juego, mientras a la par se parten de risa viendo lo que pasa ante ellos.

Dependiendo de la ronda en la que nos encontremos, todos los equipos se enfrentarán por turnos a la misma categoría. Esto, sumado al tipo de juego, provoca que el pique entre los jugadores esté servido para ver quién sabe más sobre un tema o a quién se le da mejor ciertas pruebas.

No olvidemos que al fin y al cabo estamos ante un juego semicompetitivo, en el que las fichas al final de la partida determinan el equipo ganador. Se sigue un sistema de puntuación bastante sencillo pero efectivo. Quien acierte más cartas gana la ficha. Sin embargo, el valor de las mismas aumenta a medida que avanzan las rondas, lo que da lugar que hasta las últimas rondas, cualquier equipo tenga todavía opciones de llevarse la partida. A esto hay que añadir, que la ronda que termine en empate no queda huérfana. La ficha se mueve a la próxima ronda, acumulando los puntos y haciendo así más interesante esa nueva categoría.

Hay categorías que se nos pueden dar mejor o peor. Incluso dentro de cada categoría nos encontraremos un poco de todo para que nadie se sienta fuera del juego. Desde clásicos de la música de José Luis Perales hasta los famosos más actuales como Ibai Llanos. Veremos que hay categorías y cartas variadas para todos los públicos, de forma que tanto los mayores como los más jóvenes tengan su momento y podamos sacarlo casi con cualquiera. Por ello, para evitar que los equipos estén desequilibrados, es recomendable que los grupos sean heterogéneos.

Y para el final dejamos el aspecto diferencial de este Bunny Hops!. Las cartas de desafío propone en cada categoría a cada equipo una regla extra que mejora la experiencia de juego. ¿Cómo va a ser lo mismo explicar qué es la horchata hablando como Yoda? ¿O tararear con un lápiz debajo de la lengua? ¿O hacer mímica con las rodillas pegadas al cuerpo? Algo tan simple como esto añade diversión y amplía la rejugabilidad de este título.

Pros

• Diversión: tremendamente divertido tanto de jugar como de ver jugar. Presenta varios minijuegos con diferentes tipos de temáticas y pruebas, que dan bastante juego y aseguran un rato de risas, generando situaciones inverosímiles que quedarán para el recuerdo.
• Rejugabilidad: más de 500 cartas y 1000 palabras separados en 9 categorías, a lo que sí añadimos las reglas adicionales de las cartas de desafío, hay cuerda para rato.
• Sencillez: juego accesible que apenas requiere preparación y explicación, siendo cómo de sacar a mesa con grupos numerosos a los que les encaje este tipo de juegos.

Contras

• No apto para todos: hay que contar con las personas adecuadas para que vea mesa. Juego grupo dependiente, puesto que tenemos que tener cierta confianza con quien lo juguemos para cantar y hacer un poco el payasete. Además, hay categorías muy específicas como deporte o termina la letra que no tienen por qué gustar a todo el mundo, y algunos desafíos son complicados de realizar por personas de cierta edad o con problemas físicos.
• Rejugabilidad: es tan divertido que nos apetecerá sacarlo a mesa con recurrencia. Sin embargo, si lo jugamos con regularidad, veremos que pronto se empezarán a repetir las tarjetas, por lo que será relativamente fácil recordar personajes, canciones, acciones de mímica, etc. Por ello, recomendamos espaciar las partidas para no quemarlo rápido.
• Desafíos descompensados: la gracia del juego se encuentra en las cartas de desafío, pero es verdad que los retos que proponen estas cartas pueden descompensar mucho la disputa de una categoría, ya que a un equipo le puede tocar un reto extremadamente difícil y al otro un bonus que incluso le beneficie. Nosotros optamos por jugar solo con los desafíos que te obligan a hacer acciones graciosas y que todos los equipos jueguen la misma categoría con el mismo desafío.

Mi veredicto

Y vamos terminando la reseña de Bunny Hops!, un party game donde los equipos cuentan de 1 solo minuto para adivinar todas las palabras posible. Un juego para sacar a mesa con grupos amplios, tanto en número como en edad, que a pesar de no inventar nada nuevo, lo que hace lo hace bien. Asequible, rápido, tenso y muy divertido que con el grupo idóneo va a funcionar genial. Por ello, le doy mi emblema de juego recomendado.