En la tranquila aldea de Ravenswood Bluff, una sombra siniestra se cierne sobre los habitantes. Una noche, durante una infernal tormenta, se descubre en la plaza del pueblo el cuerpo sin vida del querido narrador, empalado en la aguja del reloj. ¿Quién es el culpable? La oscuridad que nos rodea, indica que sigue entre nosotros, pero cómo podemos desvelar su identidad y recobrar la paz en nuestra, hasta ahora, pacífica región. La lucha entre el mal y el bien no descansa, debemos descubrir las mentiras de los demonios, antes que sea demasiado tarde. ¡El destino del pueblo está en nuestras manos!
Blood on the Clocktower es un juego de mesa de la editorial Bumble3ee Interactive, en el que los jugadores asumen un rol oculto, con el que deben realizar engaños y faroleos, para no ser descubiertos, tanto si son demonios como aldeanos inocentes. Pues, no sabremos de quién fiarnos. Durante el día, discutiremos y acusaremos para descubrir al asesino. Y por la noche, el demonio ejecutará sus macabros planes. Por tanto, debemos ser astutos en la información que compartimos, intentando formas alianzas, pero con cautela. Quizás nada es lo que parece…
Número de jugadores: | 5 – 21 |
Duración: | 20 – 120 minutos |
Edad mínima: | 15 años |
Género: | roles ocultos bluffing deducción |
Complejidad: | 3,03 / 5 |
Editorial: | Bumble3ee Interactive |
Diseño: | Steven Medway |
Ilustración: | Micaela Dawn Aidan Roberts John VanFleet Grace VanFleet |
Precio recomendado: | 134,96€ |
Índice
Preparación de partida
Para configurar una partida a Blood on the Clocktower debemos seguir los siguientes pasos:
- Formamos un círculo con sillas para que los jugadores se sienten, de modo que todos se vean y puedan moverse por el mismo para interactuar unos con otros.
- El narrador se reserva una zona en la parte exterior del círculo, lejos de la mirada de los jugadores, para montar su zona de juego: el Grimorio. Monta el soporte y sujeta con unos clips el Grimorio antes de colocarlo sobre este para montar su zona de juego, lugar donde tendrá toda la información necesaria para guiar la partida.
- A continuación el narrador elige 1 de las 3 ediciones, cada una con personajes y mecánicas distintas (para las primeras partidas se recomienda Trouble Brewing), y organiza su Grimorio:
- En el lado izquierdo pone la caja de la edición destapada con las fichas de personaje y recordatorio.
- Y en el lado derecho la hoja de noche pertinente, junto con las fichas de información y de noche.
- Situamos el tablero de la Plaza del pueblo en el centro del círculo. Sobre él, habrá una ficha de vida por jugador, además de un buen puñado de fichas de voto.
- El narrador lee las reglas del juego a los nuevos y refresca a quienes lleven unas semanas sin jugar, que nunca está demás.
- El narrador elige en secreto los personajes que estarán en juego según el número de jugadores.
- Las fichas de personaje con una flor naranja requieren que haga algún ajuste adicional en la composición de personajes, mientras que si tienen hojas verdes añadirá al Grimorio sus fichas de recordatorio.
- Tipos de personajes:
- Aldeanos: ayudan al bien.
- Forasteros: parecen aldeanos, pero tienen efectos especiales.
- Esbirros: ayudan al demonio sembrando confusión y caos.
- Demonio: el líder del mal, cuyo objetivo es eliminar a aldeanos y forasteros.
- El narrador mete las fichas de personaje en la bolsa para que los jugadores, por turnos, roben un personaje al azar de la bolsa. Lo miran en oculto para conocer su rol en la partida y se lo entregan al narrador, de modo que este pueda organizar las fichas en el Grimorio en función de como estén sentados y así hacer seguimiento de la partida.
Y con ello ya estaría todo listo para empezar la partida a Blood on the Clocktower.
¿Cómo se juega a Blood on the Clocktower?
El objetivo en Blood on the Clocktower depende de nuestro bando, mientras que los aldeanos deben descubrir y ejecutar al demonio usando lógica y deducción, el demonio y sus secuaces deben sembrar confusión y eliminar a suficientes jugadores para garantizar su supervivencia. Cada jugador tiene un rol secreto con habilidades únicas, y el narrador adapta los eventos para mantener el equilibrio.
La partida transcurre a lo largo de un número indeterminado de rondas hasta que se produce el final de partida. Cada ronda se divide en las siguientes 2 fases:
Fase de noche
Es el momento más silencioso y estratégico, donde los jugadores cierran los ojos y el narrador los guía para que se produzcan acontecimientos varios que afectarán al transcurso de la partida. Los pasos a seguir son:
- El narrador prepara la noche:
- Sitúa las fichas de recordatorio activas junto a las fichas de personaje que juegan esta noche para saber en qué punto se encuentran respecto a las habilidades en juego.
- Utiliza las fichas de noche para recordar qué personajes pueden intervenir esa noche. Se colocan junto a las posiciones de los personajes en la hoja de noche.
- Antes de emprender la noche, es recomendable que el narrador se tome unos segundos para planificar cómo va a resolver las habilidades de los personajes y qué información les va a proporcionar.
- Indica a todos los jugadores que cierren los ojos con frases como: “Todos los jugadores, ojos cerrados”.
- Emprender la noche: los jugadores durante la noche mantienen sus ojos cerrados, salvo que sean nombrados por el narrador, por lo que deben abrirlo para ejecutar sus habilidades u obtener información. Generalmente, es el demonio quién se levanta para matar o causar estragos. En la primera noche, y si jugamos más de 7 jugadores, el narrador debe:
- Despertar a los esbirros para mostrarles la ficha del demonio y señalar quién realiza su papel. Tras ello, vuelven a dormirse.
- Despertar al demonio y mostrarle a todos los esbirros, así como los personajes que no están en juego, para ayudarle en el faroleo. Y después vuelve a cerrar los ojos.
- En esta primera, pero también en el resto de las noches, el narrador va a levantar uno a uno a los personajes que deban llevar a cabo su habilidad, en orden de arriba a abajo de la hoja de noche, y luego volver a dormirlos.
- Comunicarse de noche: se debe guardar el mayor silencio posible, utilizando señales manuales para comunicarse con el resto de jugadores. Estas señas del narrador deben ser acordadas por todos, de forma previas, algunas de las recomendadas por el propio juego son:
- Ojos abiertos, dos golpecitos en el hombro o rodilla, para cerrarlos poner la mano sobre los ojos.
- Bueno, pulgar hacia arriba, mientras si es malvado, el pulgar hacia abajo.
- Asimismo, se pueden usar las fichas disponibles u hojas de juego.
Fase de día
Al llegar el amanecer, el narrador da el aviso de que todos los jugadores pueden abrir ya sus ojos. Ha llegado la hora de poner las cartas sobre la mesa, comienza la parte principal del juego para los jugadores. En esta fase diurna, se llevan a cabo estos momentos:
- Discusión: los jugadores tendremos que conspirar, mentir, decir la verdad, para compartir información, o mantenernos en silencio, observando los movimientos de los rivales. Se puede hablar en grupo o en pequeños corrillos, hay carta libre para la interacción.
- Nominaciones y votación: después de 5 o 10 minutos de charla, cuando el narrador lo estime oportuno, dando arranque a las nominaciones. Solo se puede nominar a 1 jugador vivo a la vez, así como cada jugador puede ser nominado y nominar 1 vez al día. El jugador nominado tiene la oportunidad de defenderse antes de comenzar la votación. Se levanta la mano para votar sí y se mantiene baja para votar no. Si tiene éxito queda marcado para ser ejecutado, a no ser que ese día haya otro jugador con más votos.
- Ejecución y muerte: al jugador que ha sido votado con éxito. No es necesaria una ejecución, puede ocurrir que no se hayan realizados nominaciones o también que, hayan sido nulas por falta de votos o empates. Al morir 1 jugador, no se revela su identidad, y se siguen estas reglas:
- Se le da la vuelta a su ficha de la plaza del pueblo y coloca 1 ficha de voto encima.
- En el Grimorio, se le asocia 1 ficha de sudario.
- Pierde sus habilidades.
- No pueden nominar y solo votar 1 vez durante el resto de la partida.
- Siguen con los ojos cerrados durante la noche y pueden debatir durante el día.
Una vez terminada la primera noche de Blood on the Clocktower, se pasa a la fase diurna y otra vez a la nocturna. Se repite esto hasta que algún bando sea declarado vencedor, llevando al pueblo a la luz o a las tinieblas.
Fin de la partida
La partida a Blood on the Clocktower acaba cuando 1 de los bandos es anunciado vencedor, ganando todo su equipo de aliados, ya estén vivos o muertos. Se puede dar las siguientes opciones:
- El bien gana si el demonio muere o si ambos equipos ganan a la vez. En ediciones avanzadas, en las que hay varios demonios, todos deben ser ejecutados para declarar la victoria.
- El mal vence si solo quedan 2 jugadores vivos o se haya ejecutado al jugador equivocado.
Reseña del juego de mesa Blood on the Clocktower
¿Estamos listos para entrar en un mundo de intrigas, traiciones y estrategias? Nos encontramos en un pequeña aldea asediada por el mal. Por tanto, entre sus habitantes se esconden aliados demoniacos, que quieren destruir la paz de nuestra aldea. Para lograr la salvación de las buenas personas del pueblo, debemos hacer equipo y combatir las oscuridad que acecha nuestra región, pero con cuidado de no caer en las tramas del enemigo. Esta trama clásica, con la eterna pelea del bien y el mal, se presenta con giros inesperados que nos mantendrán al borde del asiento.
Blood on the Clocktower no solo es un juego de mesa, sino un experencia social que lleva las mecánicas de los roles ocultos y la deducción a otro nivel, incorporando múltiples intrigas, escenarios y personajes. Si somos amante de juegos como Los Hombres Lobo de Castronegro, este juego promete sorprendernos en cada partida con experiencias absorbentes y cautivadoras. Y es que, toma elementos conocidos del género y los transforma, mejorándolos. Por ejemplo, aquí no hay eliminaciones definitivas, incluso tras ser linchados, seguimos participando activamente en las discusiones y mantenemos nuestro voto final. Este detalle aparentemente pequeño cambia por completo la estrategia, fomentando una narrativa continua y la toma de decisiones en equipo, manteniendo la implicación hasta el último momento.
Y por si fuera poco, el narrador es más que un simple moderador, sino que cuenta con un papel activo y esencial para el juego. Nos permite equilibrar las partidas, creando momentos épicos y, en ocasiones, añadiendo un toque de caos controlado, para hacer la experiencia más emocionante, con la configuración de escenarios desafiantes para ambos bandos, que pueden llevar a sembrar el casos, con la mezcla acertada de buenos, malos y forasteros, alrededor de la mesa. Así, es igualmente entretenido vivir la partida desde esta perspectiva, en la que lo conoces todos y has podido mover los hilos para desatar situaciones de confrontación y confusión.
Se incorporan roles disruptivos y caóticos como el vidente o enterrador, que obtienen información muy útil, pero deben resultar convincentes para el resto. También se puede incorporar al juego el santo que puede ser usado como cebo, el envenenador cuyo objetivo es generar confusión, así como el borracho que desconoce su verdadera identidad, sembrando el caos. Estos roles, entre otros, generan giros sorpresivos, que hacen que la partida sea más emocionante.
Por otra lado, existen una enorme variedad de personajes, lo que elimina las figuras genéricas de los aldeanos, que no tenían ninguna habilidad ni papel relevante en la historia. En Blood on the Clocktower todos los personajes tienen valía para cambiar el rumbo de la partida, por lo que deben ser tomados en serio y la partida se vuelve más inmersiva y disparatada, con el debate constante sobre el cometido de cada jugador.
Asimismo, cuenta con un sistema de votación más dinámico y estratégico, lo que añade profundidad a la experiencia, convirtiéndola en un reto mayor, lo que nos genera una gran satisfacción cuando salimos victoriosos con nuestras estratagemas, engaños y alianzas envenenadas. Los jugadores pueden nominar a alguien para ser ejecutado, iniciando un debate donde acusaremos y nos defenderemos. A diferencia de otros juegos, los votos se emiten públicamente y por turnos, lo que permite seguir observando y analizando las decisiones y argumentos dados, antes de emitir nuestro juicio. Durante el cual, intentaremos convencer y engatusar al resto para acusar a nuestro objetivo, siendo necesaria la coordinación y búsqueda de cómplices, y alguna que otra cabeza de turco.
Para disfrutar al máximo de Blood on the Clocktower, os recomendamos crear un ambiente acorde, añadiendo una música ambiental o iluminación tenue para dar un toque de misterioso. Estos detalles ayudan a los jugadores a sumergirse en la historia y aumentan la tensión durante la partida. A su vez, es fundamental contar con un narrador experimentado. El papel del narrador, como he comentado, no solo es gestionar las mecánicas, sino también ser un guía que mantenga la partida nivelada para ambos bandos. Un máster novato puede tanto sentir la presión de tantas decisiones, como provocar que el desajuste de roles entre buenos y malos haga que la partida dure un visto y no visto. Por consiguiente, si es nuestra primera vez con este papel, mejor optar por un escenario sencillo, dejándose aconsejar, o tomarlo cuando tengamos algo más dominado el juego.
En cuanto a la escalabilidad, aunque el juego admite partidas entre 6 y 20 jugadores, el número óptimo suele ser de 8 a 16. Con menos de 8, la narrativa puede quedarse algo corta, solo pudiendo disputar ciertos escenarios más sencillos, que están más equilibrados para poco número de jugadores, sin poder disfrutar de todo el potencial de Blood on the Clocktower. Mientras que más de 16, puede ser un desafío logístico para el narrador, siendo demasiado abrumador. Pero, mencionar que todo depende también del tipo de jugador que entre en la partida, si es más experimenta o menos en el juego, si le motivan los juegos de roles o si por el contrario solamente quiere echar un rato de risas. Esto puede hacer que la partida a menos o más jugadores funcione mejor o peor según los integrantes y su disposición.
Por otro lado, es necesario hablar del precio, no suele ser un tema que suela tocar, ya que depende más de nuestro entorno de jugones, pudiendo más rentable o valioso un juego u otro, según las veces que va a salir en mesa. Sin embargo, es cierto que para un juego de roles su valor es más elevado del que solemos esperar. Por ello, quiero resaltar la calidad de los componentes, desde la propia caja aterciopelada cargada hasta arriba con elementos con una ambientación cuidada, la gran variedad de personajes, habilidades y escenarios que engloba el juego, que aportan una enorme rejugabilidad, y las muchas horas de diversión que puede ofrecer si funciona en nuestros grupos.
No obstante, si hay que meditar si nuestros amigos o familiares están dispuestos a perder la vergüenza de ponerse en la piel de un personaje, debatiendo con todos los integrantes. Pues, la comunicación, junto a las disputas de quién lleva la razón o quién nos está tratando de engatusar son clave. Si no vamos a ser capaces de embaucar y engañar con nuestro discurso, quizás no sea nuestro juego. Pues, Blood on the Clocktower es un juego que requiere una alta interacción y participación activa de todos, para que funcione y enganche.
Pros
- Narrador: desempeña un papel importante y esencial, no solo modera la partida, sino que la organiza equilibrando los bandos y creando momentos épicos. De ahí, la necesidad de que sea un jugador que controle el juego para garantizar experiencias emocionantes. A la vez, que es muy divertido ver las estrategias de los demás, conociendo el papel que tienen.
- Múltiples personajes: esto aporta una enorme rejugabilidad al juego, así como capas de profundidad, pudiendo combinar diferentes roles para crear vivencias totalmente nuevas y desafiantes.
- Participación activa: a diferencia de otros juegos de mesa de roles ocultos, en Blood on the Clocktower no hay eliminación de jugadores. Nadie se queda fuera de la partida, aunque haya sido asesinado. Seguimos participando en las discusiones y votando por encontrar el mal que nos acecha, lo que mantiene la implicación y añade estrategia grupal hasta el final.
Contras
- Dependencia del narrador: esta figura es fundamental para que la experiencia de juego sea fluida y emocionante. Un narrador inexperto o malo puede desbalancear la partida, hacer que se ralentice o dure segundos con una mala elección de personajes. Lo mejor es que se ocupe alguien con experiencia, para conocer los roles completos y saber cuáles conectan mejor.
- Curva de aprendizaje: la gran variedad de roles puede resultar abrumadora al principio, así como el papel que nos ha tocado desempeñar, quizás no sepamos cómo hacerlo adecuadamente si somos novatos. No obstante, esto se soluciona jugando más y observando a los demás. Se aprecia fácilmente quién ha jugado más o menos, sabiendo usar artimañas y enredos.
- Grupo dependiente: es una inversión elevada, para que no funcione con nuestro grupo recurrente de jugones. Estos deben disfrutar de los roles ocultos, la situaciones de debate y la confrontación por llevarnos el gato al agua en los votos, usando nuestra astucia y picardía.
Mi veredicto
Blood on the Clocktower es el mejor juego de roles ocultos, hasta la fecha. Ya desde su caja tematizada, que se convierte en el mismísimo Grimorio, nos transmite que la experiencia va a ser cautivadora. Un juego social, en el que diría que lo más importante es engatusar y convencer al resto con nuestro debate, para salir victoriosos noche tras noche, tanto si nuestro objetivo es sumergir el pueblo en la oscuridad o devolverle la luz. Por tanto, nos aventuramos en una experiencia de faroleo, engaños y discusiones en las que debemos crear aliados y señalar al próximo ciudadano en ser linchado, aunque seguirán teniendo su papel en las votaciones. No obstante, no en todos los grupos funciona bien, tendremos que meditar si va a encajar para hacer la inversión que requiere. A nosotros los juegos de roles y deducción nos encantan, por lo que desde que lo probamos sabíamos que iba a convertirse en un imprescindible en nuestra ludoteca, al tener una estética tan cuidada, una narrativa tan completo y proporcionar múltiples escenarios de juego. Por todas estas razones, y las comentadas en la reseña, Blood on the Clocktower se merece mi emblema de señor juegazo.