Aprobada la nueva ampliación de la ciudad y adjudicadas las parcelas a las distintas constructores, es hora de ponerse manos a la obra. Sin embargo, a pesar de que los terrenos se han repartido equitativamente, las empresas comienzan una fiera disputa por conseguir que sus casas formen la mejor panorámica del barrio.
Barrio es un juego de mesa de la editorial Cacahuete Games. En él, los jugadores tratarán de agilizar el ritmo de construcción de sus casas, manteniendo unos estándares de calidad y armonía con el entorno, para crear una vista de su vecindario idílica. ¿Quién lo logrará?
Número de jugadores: | 1 – 4 |
Duración: | 20 minutos |
Edad mínima: | 8 años |
Editorial: | Cacahuete Games |
Diseño: | Jorge Tabanera |
Ilustración: | Jorge Tabanera |
Precio: | 13,56€ |
¿De qué va Barrio?
Barrio es un juego de mesa city building que se juega a lo largo de un número variable de rondas, hasta que alguien construye una cantidad determinada de casas. El objetivo, ser quien más puntos gane al término de la partida construyendo casas y conectando panorámicas.
Al inicio de la partida, cada jugador recibe una mano de cartas de casas y materiales. Con las cartas restantes de casas y materiales, se crean un par de mazos con los que formaremos 2 suministros: el mercado de casas y el almacén respectivamente. Adicionalmente se revela la carta de puntuación para los burruños y los escombros.
En su turno, el jugador activo realiza una de las siguientes acciones:
- Robar 1 carta de cualquier mazo o suministro.
- Descartar casas de su mano y robar la misma cantidad de cartas de cualquier mazo/suministro.
- Colocar 1 material en el mercado común y robar 2 cartas de cualquier mazo/suministro. Cuando se disponen materiales en este mercado, solo hay que tener en cuenta que la carta jugada debe colocarse adyacente ortogonalmente a otra y que el total de cartas no puede rebasar una cuadrícula ficticia de 5×5 al término del turno.
- Colocar 2 materiales en el mercado común y:
- Robar 3 cartas de cualquier mazo/suministro.
- Construir 1 casa de su mano. Para hacerlo, toma todas las cartas de una fila o columna del mercado común a su elección. Descarta los materiales que requiera la casa y pone esta frente a él, procurando conectar las casas bajadas siguiendo la simbología inferior de las mismas. Las cartas que le sobraron pueden ser materiales que pasarán a ser escombros y burruños, los cuales sumarán o penalizarán al final de la partida en función de la carta de puntuación.
Hecha la acción, roba cartas de cualquier tipo hasta tener 3 cartas en mano (solo si le quedaban menos) y se sigue jugando hasta que alguien alcanza el límite de casas construidas según el número de jugadores. Tras ello, quien tenga la panorámica del barrio más valiosa gana la partida.
Primeras sensaciones
Parece que a Cacahuete Games le salieron las cuentas con Friegas tú porque, apenas un año después de su lanzamiento, vuelve a apostar por el diseñador e ilustrador segoviano para traer su segundo juego: Barrio. En esta ocasión, salimos del jaleo que se puede liar en una cocina a la hora de decidir quien friega, para meternos de lleno en la guerra entre constructoras.
Barrio es un juego de cartas ligero y muy accesible que ofrece una experiencia satisfactoria para los grupos más familiares, pero que tiene la dosis justa de estrategia y bastante interacción para hacerlo apetecible a jugadores más recurrentes que busquen partidas rápidas y dinámicas.
City building donde la gestión de mano cobra mucho protagonismo. Debemos planificar los movimientos a 2-3 turnos vista, obteniendo materiales de los suministros a la par que «nos los vamos colocando» en el mercado común.
De este modo, podremos recoger en un turno posterior los materiales con los que completaremos los requisitos para construir una de nuestras casas. Algo que sería más sencillo si no fuera porque los demás jugadores también estarán interactuando con el mercado para hacer sus viviendas.
Esta disputa genera momentos divertidos cuando un jugador rompe la jugada a otro o cuando simplemente coloca cartas en una línea concreta simplemente por fastidiar, haciendo de este Barrio un juego de mesa agradable de jugar y apto para sacarlo a mesa con todo tipo de jugadores.