Pocas civilizaciones tuvieron un enfrentamiento tan reñido como las polis griegas. Y si no que se lo digan a los mejores arquitectos de la antigua Grecia, quienes tuvieron que plasmar sus conocimientos y poner todo su esfuerzo para que sus ciudades crecieran a pasos agigantados. Sin embargo, solo una de ellas podrá alcanzar la riqueza y gloria suficientes para despuntar como la polis más prestigiosa de la época.

Akropolis es un juego de mesa de la editorial Gigamic Games. En él, en la piel de arquitectos, desarrollaremos amplias zonas residenciales, ubicaremos equitativamente los mercados, pondremos los cuarteles en los límites de la ciudad y los templos en el meollo de todo. O al menos lo intentaremos, pero no olvidemos extraer piedra, hacer plazas y construir hacia arriba, pues solo así lograremos que nuestra ciudad se extienda hasta el cielo.

Número de jugadores:2 – 4
Duración:25 minutos
Edad mínima:8 años
Género:colocación de losetas
construcción de patrones
draft
Complejidad:1,69 / 5
Editorial:Gigamic Games
Diseño:Jules Messaud
Ilustración:Pauline Detraz
Precio recomendado:31,46€

Portada de Akropolis

Preparación de partida

Tomamos las losetas de ciudad correspondientes en función del número de jugadores, las mezclamos y formamos 11 pilas, cada una de ellas con tantas losetas como número de jugadores más uno.

Con las losetas que nos sobren, creamos una fila a modo de suministro. Situamos el token de madera en uno de los extremos de la fila, indicando cual es el inicio de la misma.

Hacemos entrega a un jugador de la ficha de jugador inicial. Cada uno recibe una loseta inicial y una cantidad variable de cubos de piedra. El jugador inicial una piedra y el resto, en sentido horario, una más que el anterior.

Dejamos las piedras restantes en la reserva y ya estaríamos listos para jugar una partida a Akropolis.

Todo listo para jugar una partida a 3 jugadores

¿Cómo se juega a Akropolis?

Nuestro objetivo en Akropolis es hacernos con la riqueza y gloria necesarias para convertirnos en los arquitectos más perspicaces de la antigua Grecia. Para ello, tendremos que dar forma a nuestra ciudad, construyendo casas, mercados, cuarteles, templos y jardines, pero sin olvidar las tan espaciosas plazas de cada área para ensalzar nuestras edificaciones.

La partida se desarrolla a lo largo de 12 rondas y cada una de estas se compone de 2 fases.

Fase de juego

Empezando por el jugador inicial y en sentido horario, cada jugador realiza los siguientes pasos:

  1. Elegir loseta: escoge una loseta del suministro. Cada una tiene un coste en piedras en función de su posición respecto al token de madera. La más próxima es gratuita, y las demás cuestan una piedra más que la anterior según se alejan del token. Conforme avance la ronda, el número de losetas se reducirá, y por lo tanto también lo hará el coste de la más lejana.
  2. Colocar loseta: posteriormente, el jugador pone la loseta elegida en su zona de juego, pudiendo colocarla:
    • En el nivel 1: a ras de mesa, por lo que basta con que un lateral de esta toque otra loseta ya dispuesta.
    • En un nivel superior: encima de otras losetas, es decir, debe estar sobre 3 hexágonos (ninguno puede quedar flotando) y que al menos 2 de ellos sean de losetas diferentes.

Tras ello, se cede el turno al siguiente jugador, de modo que todos disfruten de un turno de juego a excepción del jugador inicial, quien jugará un turno extra después de sus compañeros.

Pongamos estratégicamente las losetas para puntuarlas

Tipos de losetas

  • Canteras: cuando el jugador activo coloca una loseta en un nivel superior, gana 1 piedra por cada hexágono de cantera que haya tapado.
  • Plazas: las hay en 5 colores. Al final de la partida harán de multiplicadores para potenciar los puntos obtenidos en sus respectivos distritos. A la hora de contarlas, da igual en qué posición y nivel se encuentren en la ciudad mientras estén visibles.
  • Distritos: al igual que las plazas, los hay en 5 colores. A diferencia de estas, cada distrito cuenta con su propio sistema de colocación para puntuar, cuyo valor además variará según el nivel en el que esté.

Fase de mantenimiento

Cuando el jugador inicial juegue su segundo turno, solo quedará una loseta en el suministro.

  1. Ponemos la loseta del suministro que sobra junto al token de madera.
  2. Tomamos una nueva pila de losetas para rellenar el suministro.
  3. Se pasa la ficha de jugador inicial al siguiente compañero.

Y ya podemos empezar una nueva ronda.

Esta columna marca el precio de las losetas

Fin de la partida

La partida a Akropolis termina cuando quede una loseta en el suministro y no haya más pilas para reponer. En ese caso, pasamos directamente al recuento de puntos de victoria (PV).

Cada jugador calcula el valor de cada uno de sus distritos y lo multiplica por las estrellas de sus plazas. Para determinar el valor de un distrito, hay que comprobar:

  • Los hexágonos que cumplen con el requisito de colocación propio de cada tipo de distrito.
  • La altura en la que se encuentra el hexágono. Los que estén en el nivel 1 valdrán 1PV y a medida que suban, su valor se incrementará 1 PV más.

Veamos ahora los distintos tipos de distritos:

  • Casas (azul): puntúan los hexágonos de casas en el grupo más grande. El total de puntos se multiplica por las estrellas de las plazas del mismo color.
  • Mercados (amarillo): puntúan los hexágonos de mercado que no estén adyacentes a otros mercados. El total de puntos se multiplica por las estrellas de las plazas del mismo color.
  • Cuarteles (rojo): puntúan aquellos que tengan al menos uno de sus lados en el borde exterior de la ciudad. El total de puntos se multiplica por las estrellas de las plazas del mismo color.
  • Templos: puntúan si están completamente rodeados. El total de puntos se multiplica por las estrellas de las plazas del mismo color.
  • Jardines: siempre puntúan. El total de puntos se multiplica por las estrellas de las plazas del mismo color.

Adicionalmente, recibimos 1 PV por cada piedra que nos sobre.

Así, el jugador con más PV se lleva la partida a Akropolis.

5 formas de puntuación diferentes

Variante

Akropolis ofrece un modo para expertos que aporta una condición extra de colocación para cada tipo de distrito, que no nos exime de cumplir el requisito básico del distrito. Duplica la puntuación de un tipo de distrito si:

  • El grupo de casas más grande vale al menos 10 puntos.
  • Los mercados están adyacentes a plazas de su color.
  • Los cuarteles tienen 3-4 espacios vacíos a su alrededor.
  • Los templos se construyen en el nivel más alto.
  • Los jardines están adyacentes a un lago, siendo este un espacio vacío completamente rodeado de losetas.
Resumen para recordar condiciones y cantidad de hexágonos

Reseña del juego de mesa Akropolis

El talento de los arquitectos griegos es incuestionable, y buena muestra de ello es que hicieron algunos de los edificios más llamativos de toda la Antigüedad. No obstante, su labor fue más allá de erigir templos, teatros y estadios de una belleza sin igual, pues también tenían una especial preocupación por la proporción y la armonía de sus edificios, de modo que estos se ubicaran con cierta coherencia para optimizar el espacio de la ciudad. ¿Seremos capaces de hacerlo en este Akropolis?

Akropolis es un juego de mesa abstracto de corte familiar, en el que buscamos que el desarrollo de nuestra polis se imponga al de las ciudades vecinas. Para ello, el juego recurre a mecánicas habituales como son draft, colocación de losetas y construcción de patrones, para ofrecernos una propuesta ligera, que promete partidas rápidas y entretenidas que cuenta además con un sistema de puntuación múltiple bastante agradable.

La piedra, moneda para comprar losetas

El draft nos plantea una fila que hará del típico suministro, que nos aprovisionará de las losetas que usaremos para dar forma a nuestra zona de juego. Al principio de cada ronda, habrá tantas losetas como jugadores más 2, las cuales tendrán un coste variable en piedras según su posición en la fila. La primera será siempre gratuita y la más lejana supondrá un desembolso importante, sobre todo para el primer jugador, quien recordemos disfrutará de la ventaja de elegir primero y también de jugar un turno extra antes de dar por concluida la ronda. Las piedras no son fáciles de conseguir si no queremos pisar ningún distrito o plaza, por lo que echemos cuentas para ver qué nos conviene antes de elegir una loseta u otra.

Ya con loseta en mano, nos vamos a nuestro área de juego para ampliar la ciudad. El sistema de colocación de losetas nos brinda la posibilidad de construir tanto en horizontal como en vertical, siendo este último uno de los aspectos más destacables de Akropolis, ya que nos permite adquirir piedras conforme cubrimos canteras, que gastaremos para hacernos con losetas que necesitamos imperiosamente, y es una de las vías que tenemos para aumentar el valor de los distritos de cara a la puntuación final, de ahí que hayamos comentado lo necesario que es administrarlas bien.

Un juego de mesa para sacar con toda la familia

Aunque las restricciones en el momento en el que colocamos una loseta no son muy restrictivas, sí lo son si tenemos en cuenta que solo vamos a puntuar si cumplimos las condiciones que nos exige cada uno de los distritos, algo que ya vemos en otros juegos del género como Cascadia. Las partidas son tan rápidas que apenas tendremos tiempo de potenciar los 5 distritos, saliendo más a cuenta centrarnos en unos pocos para maximizar un par de colores, y de los restantes rascar algo, y más si con eso torpedeamos los planes de otro compañero.

Para puntuar no es obligatorio contar con muchos distritos, pues al construir hacia arriba lograremos que un único hexágono de nivel 3 valga exactamente lo mismo que 3 hexágonos de nivel 1. Sin embargo, lo que sí que no podemos obviar son las plazas, de lo contrario la puntuación final de un color se nos puede ir al traste. Es por ello que tenemos que buscar el equilibrio entre ambos múltiplos si no queremos encontrarnos con una zona residencial enorme pero que se desinfla a la hora de puntuar al tener solo una plaza.

En cuanto a la escalabilidad, Akropolis funciona bien al rango completo, gracias tanto a esa agilidad que propone como a la baja interacción, presente solo en el draft en un más que posible «robo» de loseta para evitar que un rival se dispare en un color en específico.

Ganar en altura nos hará aumentar el valor de los distritos

Pros

  • Dinamismo: que el suministro no se reponga durante la ronda y que la interacción esté solo en el propio draft, hacen que el juego fluya a muy buen ritmo, dejando a los jugadores con una sensación de desarrollo notable en los poco más de 20 minutos que dura la partida.
  • Tridimensionalidad: la posibilidad de aumentar el múltiplo de los distritos en vertical aumenta el componente estratégico del juego. No siendo necesario tener muchos distritos si somos capaces de encajar las piezas para aumentar la altura de nuestra ciudad tapando a la par todas las canteras posibles.
  • Temática: ¿un juego abstracto con tema? El requisito de colocación de cada distrito tiene cierta lógica en función del tipo de distrito al que representa cada color. Los cuarteles deben ubicarse en las afueras de la ciudad para protegerla, los mercados separados para que la demanda de cada uno sea elevada, etc.

Contras

  • Originalidad: no aporta nada que no hayamos visto ya en otros juegos del género, por lo que le falta ese punto de autenticidad que pueda ponerlo por delante de otros juegos que puede que ya tengamos por casa.
  • Variante: bajo mi punto de vista enrevesa demasiado un juego que ya de por sí funciona bien, complicándolo innecesariamente, alargando los turnos más de la cuenta y algunos son más accesibles que otros.

Mi veredicto

Y con esto vamos terminando la reseña de Akropolis. Juego de mesa abstracto familiar bastante fácil de explicar y sacar a mesa, que nos ofrece partidas rápidas y entretenidas en las que los participantes intentarán maximizar las puntuaciones de los distintos distritos que compondrán sus ciudades. A nivel mecánico no inventa nada nuevo, pero las mecánicas presentes en el juego se combinan de una forma muy acertada, encajando bien si no tenéis en casa títulos de corte similar. Por ello, le otorgo mi emblema de juego recomendado.

Juego recomendable para una ludoteca estándar
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